lunes, 29 de septiembre de 2008

SEXO POR COMPASIÓN

Si un juglar del medievo hubiera tenido que relatar un partido de fútbol cantándolo de plaza en plaza con la estructura de un cuento clásico, habría asociado la portería, cuando el partido comienza, a una doncella de virgo presente. Contado de esta manera, el portero sería el hermano mayor preocupado en exclusiva de mantener el honor de la familia. La defensa se asimilaría al ejército que resguarda al noble en su castillo. El centro del campo estaría compuesto mitad por poetas de verso fácil y mitad por guerreros que actúan en vanguardia y la delantera aunaría la elegancia de los galanes con la belicosidad de los conquistadores dispuestos a derribar los muros del castillo del valle aledaño en el que otra doncella es custodiada en otro castillo.

viernes, 26 de septiembre de 2008

EL GOL DE OGBECHE

Hay días en los que se va al estadio con la sonrisa puesta. Suele bastar con un motivo, pero esta vez había dos: se esperaba una reacción del equipo tras el lamentable espectáculo ofrecido en Bilbao y el rival, un equipo con poco pedigrí pero que ha venido a Primera División para quedarse, se ha convertido en un fetiche para los de Pucela. Será adorado en esta tierra por los buenos recuerdos acumulados.
Hace un par de años, la U.D. Almería secundó al Real Valladolid en el camino a la Primera División. El año pasado, el semblante medroso de la afición local se mutó en un rostro de alivio cuando, en el último instante del partido, un golazo de Sesma cerró (de forma casi definitiva) las puertas de ese sótano que es la Segunda División.

Esta vez el partido no iba a ser definitivo, estamos en septiembre, pero todo suma en la cesta de los puntos y en la de la confianza. Despues del estropicio en San Mamés, una nueva derrota, hubiera instalado al equipo en el furgón de los torpes y cuando uno se convence de su torpeza se empeña en demostrarlo a lo largo del curso. La victoria tiene que significar un punto de inflexión en la mentalidad de los jugadores y de la afición. Hay buen equipo, en el banquillo siempre hay soluciones y se pueden aplicar múltiples variantes tácticas en función del desarrollo de cada encuentro. Asentado Zorrilla como fortín, Málaga ha de ser el primer jalón en esta lucha contra sí mismo de un Real Valladolid con más capacidad de lo que ellos creen y la afición supone. Y entre todos, uno: Ogbeche. El delantero nigeriano persigue el gol con el denuedo de un cincuentón en una discoteca. Y con el mismo éxito. No para de moverse, de buscar parejas de baile. Va aquí y allá, se insinúa a unas y otras, pero regresa a casa de vacío.

lunes, 22 de septiembre de 2008

PESIMISMO HISTÓRICO VERSUS ORGULLO AÑEJO

El Real Valladolid acata dócilmente lo que de él se espera. Es incapaz de rebelarse contra el destino, algo que nunca puede estar escrito pero que el club pucelano, asume como dogma. De esta forma, la aspiración del equipo no cuestiona una pobre idea -pulular por la mitad de abajo de la clasificación en busca de la permanencia- que se convierte en profecía autocumplida. Ayer salió al campo superado por el escenario, se vio acorralado por un Athletic Club que no juega a nada pero que empuja y no fue capaz de dar réplica alguna.
No se puede reprochar falta de intensidad, nadie puede acusar a ningún jugador de dejación en sus funciones, pero eso no es suficiente. Falta creérselo, vivir con una convicción: queremos ser protagonistas y no meros comparsas en nuestro día a día. El año que el Real Valladolid bajó, acabó la primera vuelta en posiciones cercanas a las que dan acceso a las competiciones europeas. Preguntados miembros de varios estamentos del club sobre si se cambiaba el objetivo, respondieron a coro: no, el objetivo es no bajar. Empezó la cuesta abajo de la que costó años salir.

domingo, 14 de septiembre de 2008

LETRA Y ESPÍRITU

De repente todo cambia. Un simple hecho, en apariencia intrascendente, puede ser el detonante de un giro radical en el desarrollo de una vida. A veces ese vuelco nos deja bien situados, con el viento soplando en la dirección de nuestros anhelos, pero otras tantas nos coloca frente a unas dificultades, a priori, imprevistas. Sesma envía el balón al cielo cuando lo sencillo era introducirlo en la portería y sentenciar el partido. Cuando Pedro López cayó en el área, dudabamos si el árbitro pitaría o no el penalti; dos segundos después el Real Valladolid se aprestaba a jugar el partido con un futbolista menos.
Si el detalle viene precedido de un error propio se asume como algo natural, purgamos culpas. Más difícil es asimilar nuestras dificultades cuando son impuestas por errores ajenos, como la decisión de un juez que modifica el trasiego vital de un partido. En este caso, afortunadamente, sin influir en el signo final. Medina Cantalejo es uno de tantos árbitros que conoce puntillosamente el reglamento, pero nunca ha jugado un partido de fútbol. Y si alguna vez lo hizo, ya no lo recuerda. Pretende aplicar tan a rajatabla la letra de la ley que se aleja del espíritu con el que fue creada. Una interpretación literal del reglamento, desgarrada del conocimiento de los factores que influyen en los hechos, garantiza la injusticia en perjuicio de quien tiene menos posibilidades de defenderse.
La suerte para el Pucela es que enfrente se encontraba un equipo diseñado para no pensar y, por tanto, incapaz de obtener ventaja de su superioridad. Un equipo que se mimetiza con el espíritu ciclotímico de su afición que ayer se veía campeona de liga y hoy teme bajar a segunda. Un grupo de futbolistas que son el fiel reflejo del club al que defienden: no saben si songrandes entre los pequeños o pequeños entre los grandes y la indefinición es el eje de la mediocridad.
Coda: Sobrellevar la pobreza no es fácil y menos cuando somos conscientes de lo que no podremos disfrutar. Escudero va a ser como una marisquería en el paseo de un mendigo. Azuzará los jugos gástricos de la afición, pero serán otros los que disfruten del sabor de su juego. Disfruten su aroma mientras dura.

lunes, 1 de septiembre de 2008

TIEMPOS ¿MODERNOS?

No hemos tenido que esperar. Primera jornada, primer apagón y el R. Valladolid como protagonista. Es el sino de un tiempo, el nuestro, en el que la voluntad de casi todos está supeditada al designio de quienes detentan el mango de la sartén. Unos pocos mandan y el resto pagamos sus ambiciones, sus caprichos o sus enfrentamientos.
Los intereses de dos grandes grupos empresariales colisionaron en su afán por adueñarse de las retransmisiones del fútbol y como consecuencia no pudimos ver el arranque liguero de un R. Valladolid cuyos resultados en la pretemporada habían cargado de ilusión las alforjas de los aficionados. Una guerra que les afecta sólo a ellos impidió, como efecto colateral, que comprobásemos si ese estado de gracia se iba a mantener o la competición oficial nos devolvería a la cruda realidad.

lunes, 25 de agosto de 2008

LO SERIO Y LO QUE SOLO LO PARECE

Concluye la pretemporada, ya se avista el comienzo de la Liga. Mala noticia porque, de la misma forma que las golondrinas avisan de la llegada de la primavera, la competición oficial llega a la par que el otoño. Los 10 goles en dos partidos del Real Valladolid, como aquella chica que algún verano conocimos, son ya una foto añeja, un regusto placentero, una nebulosa atropellada por el día a día que se impone. Una realidad que se puede afrontar con esperanza o con miedo, con ilusión o con nostalgia, haciéndonos dueños de nuestro futuro o llorando ante la foto de aquella muchacha.

viernes, 8 de agosto de 2008

LA CALLE ES DE TODOS

Lejanos aquellos días de “la calle es mía” hoy queremos reivindicar la calle como espacio de convivencia, como escenario de encuentro. Hoy, nuestras ciudades, están invadidas por el coche -un instrumento útil transmutado en icono de la postmodernidad- desde su diseño hasta las principales decisiones sobre ordenamiento urbano. Se piensa a partir del coche y quedan pocas alternativas para el resto que se limitan a sufrir sus consecuencias. El coche, tras 30 años de abuso, monopoliza el espacio urbano, eleva el nivel de ruido ambiental, empeora la calidad del aire y supone un riesgo directo para la vida a causa de los accidentes. Paradójicamente la mayoría de los desplazamientos urbanos no se realizan en coche, sin embargo todo está organizado para su uso exclusivo. Además esta imposición es de los más fuertes sobre los más débiles: de personas sanas entre 18 y 65 años hacia personas mayores, menores de 18 años o con algún grado de discapacidad (los más propensos, además, a sufrir las negativas consecuencias para la salud del uso indiscriminado del vehículo privado). Ante este conflicto Calles para Todos ofrece una solución basada en la reducción del uso del coche y quiere abrir un debate que conlleve una reasignación del espacio urbano primando soluciones alternativas para la movilidad. Es un desafío, un guante lanzado al aire que recogemos las personas y colectivos que pretendemos abrir un espacio de reflexión. Somos conscientes de los daños que provoca el actual modelo sobre nuestras vidas -duración y calidad- y estamos dispuestos a hacer ese llamamiento dentro del marco de esta Semana Europea de la Movilidad. Una semana es poco tiempo para la reflexión y un día sin coches es una gota de agua en el océano pero queremos asirnos al valor simbólico para trascender hacia lo cotidiano. Desde aquí, quienes suscribimos, nos comprometemos a trabajar para que se implanten medidas permanentes que permitan una movilidad basada en criterios que defiendan la salud de las personas y del planeta, que se fundamente en el interés público y que partan desde la ordenación del territorio urbano.

martes, 1 de julio de 2008

LA NOCHE DE LOS REGISTRINES

Apenas contábamos diecisiete o dieciocho años y empezábamos a salir por la noche. Ellos salían más tarde, casi cuando nosotros regresábamos. Al cruzarnos nos miraban perdonándonos la vida, pero con un punto de ternura. Ellos empezaban la fiesta, nosotros la dábamos por concluida. ¡Hasta mañana, registrines! Les miramos con cara de no entender y les preguntamos que significaba registrín. Se rieron como si no hubiera más días para reír. Pero nos lo explicaron. Tiempo atrás, cuando a España la conocía la madre que la parió, existían las paradas de yeguas. Unos lugares a donde se las llevaba para que un caballo las preñase. Pero no eran tiempos de bonanza y podría ocurrir que la yegua no estuviese en celo -aunque el dueño pensase que sí-, se rebelase y a resultas de una mala coz retirar de la carrera al semental. No era cuestión de experimentar dado el valor del caballo. Por tanto, cuando una yegua llegaba a la parada, se sacaba al registrín: un burro con una ingrata labor. Si la yegua no estaba en celo, la coz se la llevaba el asno. Si, por el contrario, la yegua no se encabritaba, se retiraba al burro al establo y salía el caballo. Así nos veían y así veían el mundo. Cosas del siglo pasado, de los años de la furia y la testiculina. Tras el domingo queda escrito un punto y final.

martes, 20 de mayo de 2008

EL ROBO DE LA POLÍTICA

La sociedad es un cuerpo móvil, los diagnósticos sociales son, por tanto, como la fotografías: retratan un espacio concreto en el instante preciso en que se tomó, ni lo que antes hubo, ni lo que después habrá. Y la fotografía de este preciso instante, en lo referido a la relación de la sociedad con la política, esto es, la participación en las decisiones que afectan al modo en que la sociedad se organiza, muestra una abismal separación. Un desapego cuyas causas merecen ser analizadas con detenimiento porque las consecuencias son profundamente nocivas. Es menester adentrarse en el estudio de las causas para incidir en ellas y dar un viraje de 180º hasta conseguir que la sociedad, el conjunto de la población de cada espacio físico, sea consciente y consecuente con las decisiones que se toman que afectan al conjunto del que formamos parte y siendo parte afectada, es un ejercicio de responsabilidad implicarse y no el depositar sin más una delegación.

Pero en esas estamos y eso es lo que se ve en la fotografía, hemos restringido el valor de la democracia a una sucesión de páramos de pasividad de cuatro años de extensión. Y, entre uno y otro, el ejercicio de un voto como único elemento activo. Mientras, desde la calle, se habla con desdén de todo lo que huela, siquiera tangencialmente, a política. Hasta el punto de haber convertido a este sustantivo en un adjetivo de carácter peyorativo. Cualquier nombre al que se le califica de político ya está insultado. 

En vez de implicarnos en el devenir de los acontecimientos, encargamos a unas personas una labor con el objeto de que en el entretanto no nos molesten, una especie de subcontrata de gestión municipal, autonómica o estatal. Ese desapego rearma el poder de unos pocos hasta el punto de haber llegado a un estado de oligocracias alternativas entre dos grupos de poder que se instalan en el centro de operaciones de las dos grandes fuerzas políticas que se reparten el tiempo en el mando de las operaciones. Dos máquinas diseñadas para ganar elecciones. Cuando alguien de estas dos corporaciones, PSOE y PP, gimotea cual plañidera en medio de discursos en los que suplican que se ha de revestir a la política de dignidad, está mintiendo. Porque pretenden que las cosas sigan igual, que el paisaje de la foto se congele. Mientras haya ese desapego de la sociedad hacia la política les dejaremos hacer, recibirán insultos pero nos habrán robado lo nuestro, les llamaremos perros, pero les tiraremos pan. 

No hay mejor ejemplo que dos citas, una se le atribuye al dictador Franco, quien ante una petición de consejo respondió: “Haz como yo, no te metas en política”. La otra corresponde a uno que fue ministro con el anterior, Manuel Fraga, quien no tuvo reparo en afirmar que “la política es tan fea que hasta las suegras se llaman así”. Pero ninguno se apeó del burro hasta el final. O sea, ellos a mandar y los demás a callar que esto es feo y desagradable. Enmendar todo lo relacionado con lo público no es, por tanto, un error, sino un ejercicio premeditado para que el común de los mortales huyamos y les demos barra libre para que hagan y deshagan a su antojo.

La segunda causa de este desafecto es la perversa dinámica de la política como espectáculo.  Es un modelo cultural semejante al que emana de estos programas de televisión en el que los famosos lo son porque salen en televisión. Y cuanto más salen, más famosos son. La televisión da poder a quien sale en ella y en el mundo de los que gobiernan se ha creado una dinámica parecida. Cada grupo es conocido y juzgado por sus “eslóganes” más que por la labor política que desarrollan, las cámaras están más pendientes de lo inmediato, del chascarrillo, de lo chocante, que del contenido. Nadie sabría decir cuáles son las diferencias sustanciales entre la propuesta de Esperanza Aguirre y la de Mariano Rajoy después de haber monopolizado el tiempo que se ha dedicado a la información de estos asuntos. Millones de palabras para debatir sobre la nada que les diferencia.  Todos hemos visto a Carme Chacón desfilando ante contingentes de soldados y sólo hemos leído análisis (algunos con una absoluta falta de respeto que define a sus autores)  sobre un debate que, a estas alturas,  ya parecía superado: la igualdad entre hombres y mujeres . Pero ni un renglón sobre la política de defensa que la ministra planea ejecutar. Y así hasta el infinito, los platós convertidos en escenarios políticos y los espacios “constitucionalmente establecidos” para el debate democrático, los partidos políticos, vacíos de contenido. 

La política es tan fea que la quieren exclusivamente para ellos y a nosotros nos quieren alejados.  Eso vemos en la foto de hoy, podemos colocarnos de otra manera para próximos retratos.

Publicado en "Delicias al día" en 2008