domingo, 23 de octubre de 2011

Llegó un amigo

La afición del Pucela dice con sus palmas que es mejor caer en gracia que ser gracioso.


Se tuvo que hacer un nombre como actor en la vecina Francia. De hecho, apenas tuvimos noticias de Sergi López hasta bien superada la treintena cuando llegó a las pantallas españolas una película que, previamente, había seducido a millones de espectadores allende los Pirineos: 'Harry, un amigo que os quiere'.
Sergi López muestra su valía interpretativa dando vida a este complejo personaje, es capaz de impregnar de grises la personalidad de Harry, un hombre candoroso, simpático y bonachón y a la vez inquietante; un tipo que puede ser cercano y distante en el mismo fotograma. Harry irrumpe de sopetón en la vida de Claire y Michael. En los años de instituto fue compañero de este último, uno de esos que apenas perduran en algún recoveco de su memoria. Pero el sentimiento del protagonista es otro bien distinto, Harry admira con devoción a Michael. Para él, cada instante que pasaron juntos está anclado en sus mejores recuerdos.

domingo, 16 de octubre de 2011

Kitty Manucho



Su padre nunca estuvo, su madre respondía con un frío y escueto 'murió' cuando le preguntaba por él. Al poco su madre dejó de estar, un coche se la llevó por delante. Sin raíces, Marco Stanley Fogg deambulaba por la vida 'tutelado' por su tío Víctor, un ser tan perdido como él, clarinetista de tercera, aspirante a músico célebre, un hombre que intentó, con tan buena voluntad como escasa capacidad, cubrir el hueco afectivo que se había abierto en la vida de Marco. El propio nombre del protagonista incide en ese exilio interior al evocar a tres personajes en constante peregrinaje: Marco, por el navegante veneciano; Stanley, por el explorador y periodista de origen británico, y Fogg, un contracción del apellido original de sus antepasados a la que se llega por la desidia de un funcionario de aduanas, apellido idéntico al del protagonista de la novela de Verne 'La vuelta al mundo en ochenta días'.
En solo ocho, el Real Valladolid ha dado la vuelta a España por activa, de norte a sur, pasiva, de sur a norte, y perifrástica, pero ni ha comerciado con especias, ni ha encontrado a su doctor Livingstone. Ha vuelto a casa enrojecido, además de eliminado de la Copa y sin terminar de saber quién es en la liga. A veces ofrece momentos esperanzadores, como el M. S. Fogg adolescente. Otras parece que ha tomado la decisión de abandonarse a sí mismo esperando una muerte por inanición como cuando se acaban sus recursos económicos y ya no tiene a su lado a Víctor. Pero, de repente, cuando todo parece indefectiblemente perdido, aparece en el último instante Kitty Wu, rearma al protagonista que, en sus brazos, encuentra la fuerza suficiente para seguir deambulando.

lunes, 10 de octubre de 2011

Cuentos marroquíes

Digamos que sucedió cuando ya no lo esperaba, por eso el gol gritado salió de mi boca con más contundencia, con más rabia, sonó más alto. Un instante después todos cantaron gol y alguno me miró con un gesto que me interrogaba: ¿cómo lo sabía? Sonreí mientras festejaban su gol, coetáneo y de similar ejecución al de Javi Guerra, el que acababa de marcar Marruecos a Tanzania. Solapamos alegrías aunque ellos creyeran que celebrábamos lo mismo. Menos mal, me dije, de haber sido Tanzania quien hubiera atinado con la portería, y teniendo en cuenta mi aspecto, no hubieran dudado de que yo era un tanzano infiltrado y dada la pasión con la que se vive el fútbol podría haber tenido algún problema, al menos alguna mala mirada. Cuando hablo de pasión no exagero, la gran pantalla en la que se observa el litigio entre las selecciones africanas está flanqueada por dos grandes banderas, una del Barça, la otra del Madrid, fotografías de varios equipos españoles comparten espacio con las del soberano (en todas sus acepciones) marroquí. La conexión a internet llega del Cinema Rif de Tánger donde proyectan Larby, una biografía de Ben Barek, futbolista marroquí que triunfó a mediados del siglo pasado en el Atlético de Madrid. Todo huele a fútbol y a viejas historias.

jueves, 6 de octubre de 2011

Unos galardones al ingenio y la audacia


Ingenio y audacia. Esas son dos de las características principales que presuponía para la profesión el gran periodista y maestro de periodistas Francisco de Cossío, quien fuera director de El Norte de Castilla y quien, desde 1987, da nombre a los premios que reconocen la labor del gremio en Castilla y León. Así lo recordaron las compañeras Sonia Andrino, jefa de Castilla y León del diario decano de la prensa nacional, y Leticia Sánchez, de Radio Televisión Castilla y León (RTVCyL), que por unas horas dejaron sus quehaceres cotidianos para presentar los Premios Cossío 2011.

Cabe destacar el reconocimiento a la trayectoria profesional del fotógrafo burgalés Federico Vélez, con 40 años a su espalda, mejor dicho a sus hombros. Tras seguir los pasos de su padre, ahora es su hija Sara quien podrá tomar el testigo de «la memoria gráfica de Burgos». También se encontraban en la sede de Presidencia de la Junta su mujer, Maruja Moral, sus otras hijas, Miriam, Natalia y Laura, sus nietas, Lidia, Claudia y Marta, su nieto, David, y sus yernos.
De los siete finalistas, el Cossío 2011 fue a parar a manos de Álvaro Melcón y Lourdes Matilla por su reportaje 'Las voces de la memoria', emitido en Onda Cero Burgos, sobre las víctimas del terrorismo.
Las continuas menciones a la muerte de 4 trabajadores en las obras del embalse de Castrovido fueron inevitables. Entre otras, la del colaborador de El Norte de Castilla Joaquín Robledo, finalista en la categoría de Cooperación y Desarrollo por una serie de artículos publicados durante los mundiales de fútbol bajo el título genérico de 'Vallisoletanos con otra camiseta'. Robledo aprovechó la presencia del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, para reclamar mayores medidas de seguridad. Los otros seis finalistas eran la periodista de RTVCyL Ana Rayaces (Oportunidades); Julio Valdeón Blanco (Opinión), aunque recogió el galardón su madre, Elena Blanco; Jesús Salvadores, del 'Diario de León' (Fotografía); Rodrigo Pérez Barredo, del 'Diario de Burgos' (Prensa); y Álvaro Elúa, de RTVCyL, (Televisión).

Publicado en "El Norte de Castilla" el 6-10-2011

lunes, 3 de octubre de 2011

El Elche y el Che

Cabía la posibilidad de asumir la estrategia soviética, un tácito acuerdo de no agresión, pero él entendía que dicho pacto se había firmado contra los países 'menores' que nada podían decidir sobre su futuro. En esas condiciones entendía que frenarse por el miedo al poder omnímodo del enemigo y no entablar batalla era la forma más indigna de perder.
Asumió la necesidad de ese enfrentamiento pero era consciente de que para vencer a tamaño rival no podía aceptar que las leyes vinieran impuestas y pretendió modificar el tablero donde se desarrollaba la partida y las normas de la guerra. Lo dejó escrito en en una célebre cita: «Hay que llevar la guerra hasta donde el enemigo la lleve: a su casa, a sus lugares de diversión, hacerla total. Hay que impedirle tener un minuto de tranquilidad, un minuto de sosiego fuera de los cuarteles, y aun dentro de los mismos; atacarlo dondequiera que se encuentre, hacerlo sentir una fiera acosada por cada lugar que transite. Crear dos, tres, muchos Vietnam».

lunes, 26 de septiembre de 2011

Los caminos a Rivilla

Terminar en medio del campo o en el pueblo que no era se fue convirtiendo en un tradición. No había año que atináramos con el camino que conducía a Rivilla de Barajas. No son más de ochenta las personas que viven allí habitualmente, pero conseguían convocar a miles de jóvenes (y no tanto) durante unos festejos que no se correspondían, por exceso, con el tamaño de este pueblo abulense.
La memoria me traiciona y no recuerdo bien si las fiestas se celebraban la última semana de julio o la primera de agosto pero se celebraban, y de qué manera. A este enclave morañego se accede (o se accedía), si se va desde cualquier pueblo de la ribera del Trabancos, por uno de los caminos de concentración que parten de la carretera que une la nacional Ávila-Salamanca con Fontiveros, la cuna del místico Juan de Yepes. Uno de los caminos, pero ¿cuál? Año tras años estábamos seguros de acertar, año tras año terminábamos en medio de una tierra recién segada o incordiando a una pareja que, al amparo de la luna, había aparcado buscando intimidad a un lado de una vía por la que nadie debería circular a esas horas.

martes, 20 de septiembre de 2011

EVA MORENO, JOAQUÍN ROBLEDO Y EL DUENDE ELÉCTRICO EN "COMIDA CON AMIGOS" EN EL ECLIPSE









Esta semana fueron tres los invitados a nuestro cocido, cocido divertido de verdad, porque hay mucho que aprender con mi musa de las ondas (y voz del autobús) Eva Moreno, mucho hay que debatir con ese sabio del futbol llamado Joaquín Robledo y mucho motivos hay para pasarlo bien con el Duende Eléctrico. Como para un libro. Impresionante y gracias.



domingo, 18 de septiembre de 2011

Miedo, mentira, prejuicio

El caballo se encabritó y tiró al suelo al jinete. A resultas del golpe, el joven se rompió ambas piernas. Su padre, ya anciano, maldecía su suerte. ¿Cómo iba a poder llevar a cabo la inminente cosecha si a él le faltaban las fuerzas y su único hijo estaba imposibilitado? Días después del accidente, el joven tuvo noticias de que su país había declarado la guerra al vecino y que, por edad, tendría que alistarse. Él, sin embargo, como consecuencia de las lesiones, esquivaría la muerte en el campo de batalla. Estando en casa celebrando su fortuna se le vino el tejado encima, falleciendo en ese mismo instante. Al poco se supo que los gobiernos en contienda habían firmado el armisticio antes del primer disparo.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Palabra de Casandra

Las palabras siguen brotando de su boca aunque nadie la crea. Casandra es consciente de que el esfuerzo es inútil pero es más fuerte la necesidad de advertir que la consciencia de que, diga lo que diga, de nada servirá. Ella, hija de los reyes de Troya, supo antes que nadie la tragedia que se cernía sobre su reino, lo supo y lo dijo, pero nadie le creyó.
Antes, cuando era sacerdotisa de Apolo, el dios le concedió el don de la adivinación a cambio de su entrega carnal. Ella, la profetisa, el oráculo, era respetada por su pueblo hasta que negó su promesa y Apolo buscó venganza con la crueldad propia de quien es capaz de servirla en plato frío. Podría haber retirado el privilegio concedido, pero sería poco castigo. No, no le negaría el don pero desde ese momento nadie creería sus palabras así predijese la caída de Troya o su propia muerte.