Blog sin más pretensión que la de poner un poco de orden en mi cabeza. Irán apareciendo los artículos que vaya publicando en diversos medios de comunicación y algunas reflexiones tomadas a vuelapluma. Aprovecharé para recopilar artículos publicados tiempo atrás.
domingo, 14 de marzo de 2021
SERGIO EN EL CARRIL BICI
martes, 9 de marzo de 2021
VIAJE AL MISMO SITIO
En los tiempos actuales, los de la pandemia, se están acelerando procesos que ya se apuntaban, recortando la duración de las boqueadas. Pero también nos están recordando que, a veces, caminamos en círculo, que nada nuevo hay bajo el sol, que lo que se dio por pasado puede emerger abruptamente en el presente. El domingo se congregaron al lado de la catedral pucelana un puñado de nostálgicos del régimen anterior. Con su pan se lo coman, si no fuera por un detalle. Casualmente, en ese mismo punto se encuentra ‘El largo adiós’, el cafetín en que cuarenta años atrás un trío de ultraderechistas, con la misma parafernalia, con el ¡arriba España! como colofón para atribuirse los hechos en llamada a El Norte de Castilla, tirotearon a la clientela e hirieron de gravedad -el azar evitó una tragedia de mayor dimensión- a Jorge Simón Escribano.
sábado, 6 de marzo de 2021
TRIUNFO EN ‘HOUSE’
lunes, 1 de marzo de 2021
TRASIEGO VITAL
Veinte años tiene mi hijo, veinte que han sido un suspiro. Un mes antes de su nacimiento me habían practicado una colonoscopia. En la consulta del especialista -con toda la calma del mundo porque Alicia, aprovechándose de la tripa de ocho meses, había sonsacado a la técnico que realizó la prueba que todo estaba en orden- se detuvo el mundo:
miércoles, 24 de febrero de 2021
SIN CARICIAS
El gran acierto de ‘Pena de muerte’ (Tim Robbins, 1995) radicó en presentar al penado como un ser hosco, abyecto, incapaz de despertar simpatía alguna… y culpable. De esta manera, se ofrece una reflexión y se sirve un debate desgarrado, sin concesiones a la frivolidad, sin subterfugios para la buena conciencia. Un reo empático, la duda sobre un posible fallo judicial, la coartada de una infancia miserable, apelarían a las más taimadas emociones del espectador embarrando, de esta forma, la esencia del debate sobre la condena capital.
Fuera de la pantalla no tenemos un guion preocupado de separar el grano de la paja, de cerrar salidas cómodas, de evitar caricias en el lomo. Así, cada vez que se abre un debate de fondo, nos encontramos con respuestas autocomplacientes, mutis por el foro o trampas dialécticas para que parezca que se opina que sí cuando se dice que no. El penúltimo, el de la libertad de expresión. Defender que alguien exprese lo que considere, por desagradable u ofensivo que resulte a otros, cuando ese alguien nos sea simpático, cuando estemos de acuerdo con lo que dice -aunque nosotros no nos atreviéramos a tanto-, cuando asumamos una cierta cercanía por más que entendamos que se ha pasado de frenada, no es defender la libertad de expresión sino mera autocomplacencia. Cuestionarlo, por antipatía, desacuerdo o lejanía, pone en un brete –por más retruécanos en que uno se ampare- una pretendida defensa de tal libertad.
domingo, 21 de febrero de 2021
PERAS Y PERAS
-Lo dices porque te parece un poco caro, ¿no?
Estuve a punto de decirle que sí, pero entendí que aquella
no era la palabra precisa, que la dualidad caro/barato solo tiene sentido si se
valoran diferentes precios frente al mismo producto, lo que no era el caso
porque, aunque ambas se llamen `pera’ (o plátano, o fresa, o…), nada tiene que
ver la que compraba yo con la que él guarda en la bolsa tras pagar tres veces
más.
-No, ‘caro’ no es la palabra. Explica pocas cosas. Ya me entiendes. Hay peras y peras.
domingo, 14 de febrero de 2021
ANTES, AHORA; AHORA, ANTES
Tampoco sería extraño que alguna pareja de zagales continúe haciendo zanja con el ir y venir de mi casa a la tuya con la excusa del ‘ahora te acompaño yo’. Eran los tiempos en los que la hora de recogida no se expendía por prescripción autonómica.
martes, 9 de febrero de 2021
LLUVIA MACHADIANA
Hasta entonces, nunca pude abrir la ventana sin que el ruido
me recomendara volverla a cerrar. Es lo que tiene que te caiga justo debajo el
punto en que la avenida de Salamanca pasa a ser de Burgos. Ahora ya es posible
abrir, ver y no escuchar nada. Deseos
tengas y se cumplan, dicen que dice una maldición china.
El silencio, la distancia ya no es una oración subordinada, y si lo es, hemos perdido la secuencia de la frase principal. Las fábulas que comenzaban con ‘el día en que esto concluya’ se han dejado de contar. En vez de alzar la mirada buscando una luz al final del túnel, agachamos la cabeza y tiramos, como se pueda, para adelante.
domingo, 7 de febrero de 2021
NO ‘GOLEMOS’ LO MISMO
-Madre, deme las llaves de casa, me voy a duchar.
Áurea, enlutada desde siempre, torció el gesto.
-Vaya con esta juventud, vais a terminar peces. ‘Tol’ día en
el agua.
-Pues una vez cada día -apuntó mi primo-, para quitar el mal
olor.
-¿Tos los días? Madre del Amor Hermoso. Cuando moza, alguna
vez de vez en cuando en el barreñón.
-Así oleríais.
-Sería, pero como ‘tos golíamos’ lo mismo nadie se daba
cuenta.
Y acabó la primera parte. El aroma a descomposición que desprendía
el Pucela no había variado en una semana, solo que en esta ocasión no difería
del tufo del rival. Ambos ‘golían’ lo mismo. Ni un triste disparo en tres
cuartos de hora. En este mal de muchos, que haya tres con menos jabón podría
ser el consuelo. Y mira por dónde, el Alavés podría ser uno de ellos. Pero en
el descanso, los vitorianos se enjabonaron, pasaron bajo el agua de una idea,
se rociaron con el desodorante de la convicción y se perfumaron con la colonia
del talento de Lucas Pérez. A partir de ahí, se notó demasiado el ‘golor’
pucelano. Hasta la foto lo desprende. No sé si por papanatismo, esnobismo o
mala conciencia tras el gol recibido del levantinista Bardhi, el Valladolid, en
un sinsentido, colocó al debutante Olaza tumbado tras la barrera para defenderse
ante un posible disparo raso de Lucas en un tiro libre señalado a la altura de
Miranda de Ebro. En la imagen se vislumbra la improvisación. Cuesta creer que
la orden partiera del banquillo, que la ejecución se hubiera ensayado
previamente. Lo mismo da cuatro -las inmediaciones del área- que cuarenta -la
provincia de Burgos-.
El mismo Lucas, en la jugada del gol, en otro jirón
arrancado a este deshacer pucelano, acarició el balón media docena de veces sin
oposición. Él, que es el golpe de inspiración de su equipo, al que más hay que
apretar, recibió la pelota, pensó, armó y ejecutó un pase preciso a su
compañero Martín que irrumpía por una vía expedita. Fin en diferido. Faltaba un
buen tramo; era patente, sin embargo, que no habría respuesta. Por eso, pese a
ir perdiendo, cuando habitualmente los minutos parecen volar, el estrambote se
hizo eterno.
Como eterna se está haciendo esta última parte de la
travesía de Sergio; un epílogo que, dure lo que dure, desprende el hedor de ciclo
acabado. Si Sergio leyese esto, si me admitiese un consejo de divorciado, le
diría que diera el paso a un lado. Dar palos de ciego, mostrar lo peor de uno
mismo como en la rueda de prensa del viernes, solo repercute en el propio
menoscabo. Usted es mucho más que eso. Así pues, señor González, ante una
ruptura inapelable, la firma, mejor cuanto más pronto. Será la única manera de
salvar algo de una relación sin futuro y mantener el corazón limpio para
empezar en otra parte. Se ha ganado salir de Pucela con honores, el privilegio
de ser recibido con aplausos cuando vuelva.
Y así, separados, dense ambas partes la posibilidad de
empezar a oler bien en otra relación.
Publicado en "El Norte de Castilla" el 07-02-2021