domingo, 10 de diciembre de 2023

SAL, AZAR, Y EL AZAR SALIÓ CON EL 38

A lo largo del siglo pasado, en nombre del desarrollo, la piqueta se ensañó con el patrimonio arquitectónico vallisoletano, con el de casi todas las ciudades españolas, pero de forma significativamente cruel con el de Valladolid, población donde un inventario de sus edificios históricos derruidos ofrecería la posibilidad virtual de pasear por un espacio que, siendo el mismo, resultaría absolutamente ajeno. De la misma manera, al patrimonio afectivo personal lo demuele el maldito tiempo con una piqueta que exhibe con fruición. Cumplida determinada edad, al caminar por donde se ha desarrollado la propia vida, el cuello gira maquinalmente y dirige los ojos hacia un sinnúmero de establecimientos que dejaron de ser; la imaginación entonces vuela para recrear escenas, para abrazar a los protagonistas que se alejaron, para añorar a los que de seguro ya no podrán volver. Desde el Rosarillo a San Miguel, desde cualquier punto de la calle San Blas, busco indefectiblemente 'El Pala', al Javi tierno y gruñón que una mañana otoñal del 96 colgaba la porra navideña en la que sorteaba una caja de vino, un jamón y, sobre todo, sobre todo pese a haber escrito 'jamón', un cuadro de Manolo Sierra. Me encontré la potestad de elegir el primero: «apúntame el 69». Javi sonrió picarón mientras me anotaba: «ya, ya». «Es el año en el que nací, malpensado de las narices». Tal vez no fuera 'narices' la parte anatómica aludida. Al día después, nada más entré, se me acercó discreto: «Joaquín, verás, no te importará –titubeaba trémulo– escoger otro número, es que una vecina que todos los años...». Le corté: «qué más da, como si algún número tuviera más posibilidades que otro. Ya que no el año, el día; nací un tres de agosto, ponme el 38». Como es de suponer, la lotería de Navidad volteó los números de aquel año 96: «yo qué iba a saber –se disculpaba Javi–». Desde entonces, el 69 tiene una deuda conmigo. El 38 se me quedó mirando con cara de tonto. Tampoco tenía la culpa, pero... Hasta hoy, que me ha resarcido. Gracias al acúmulo de bajas en la delantera, el escalafón le ha agasajado a Salazar con la posibilidad de jugar en el primer equipo. Su dorsal, efectivamente, el 38.

martes, 5 de diciembre de 2023

RAZÓN DE ESTADO

Si de Manuel Fraga se apuntaba que le cabía el Estado en la cabeza, no sería exagerado afirmar que en la testa de Kissinger se albergaba el mundo entero. Desde luego, en sus más de veinte años de devenir político, acaparando para ascender, ascendiendo para acaparar, dejó marcado su sello. En plena Guerra Fría, en una etapa de vigor del poder de los Estados Unidos, logró aplicar implacablemente su personal visión -un enfoque calificado con términos como ‘realista’ o ‘pragmático’ que antepone el interés nacional inmediato a cualquier otra consideración- a la política exterior estadounidense. Un interés que se alcanza también por la fuerza, firmó de su puño y letra: “el más poderoso prevalecerá”. Despliegan el mundo cual tablero en el que se establece el juego. Las personas del común somos meros accesorios prescindibles.

Las necrologías se debaten entre sus indudables logros diplomáticos y sus ‘realistas’ y ‘pragmáticas’ decisiones que provocaron centenares de miles de muertos, apoyos a dictaduras o al derrocamiento de regímenes democráticos. Las necrologías, no un tribunal en su momento. La fuerza.

Kissinger sublimó el concepto ‘razón de Estado’, una excusa utilizada para arrinconar restricciones éticas en pos de un presunto bien superior asumiendo, faltaría, un mal menor, unos daños colaterales… Al final, la historia enseña que las razones de Estado son las razones de los que tienen en su mano el Estado, comerciantes de armas o vendedores de miedos incluidos.

Su voz, ya sin poder institucional, buena muestra del afianzamiento de su doctrina, mantuvo predicamento los siguientes cuarenta y cinco largos años. Su letra lo mantiene. No extraña, al fuerte le interesa imponer la doctrina en la que prevalece la fuerza.

Un relato apócrifo cuenta que Umbral, al ser preguntado por su favorito al Nobel de Literatura, respondió con su seco vozarrón “a Kissinger”. Ante la estupefacción del entrevistador, alegó: “si le han dado el de la paz, podrán entregarle el de Literatura”. Si se lo hubiera propuesto…

 Publicado en "El Norte de Castilla" el 05-12-2023

domingo, 3 de diciembre de 2023

ATONÍA, AFONÍA, AGONÍA

Nunca probé drogas de las catalogadas como duras. Al margen del contexto social en el que me desenvolví en las épocas más propicias para haberme despeñado por el precipicio –un entorno alejado de determinados ambientes marginales en los que se requerían dosis de heroicidad para retorcer el destino– la razón concluyente de mi constante negativa procedía de mi interior, del miedo que me provocaba a mí mismo. Intuía que, ante mi presencia, el 'prueba, que por una vez no te va a pasar nada' se trastocaba en falacia, el mendaz 'yo controlo' carecía de validez. Muestro una incapacidad absoluta para esquivar comportamientos adictivos. Por eso no compro más jamón del apropiado para comer de una sentada. Si adquiriese mayor cantidad, esta dejaría de ser 'apropiada' porque caería igualmente de una sentada. Por eso no me doy de alta –ni aunque me cedan la contraseña– en plataformas televisivas. Ni sabría por dónde empezar, ni mucho menos cómo terminar.

domingo, 26 de noviembre de 2023

ANTES TODO ERA MEJOR

En algún momento de la vida, síntoma nítido de que la juventud huyó por la gatera, se nos activa un chip en el cerebro que le incita a comparar cualquier hecho actual con algún otro suceso asimilable acontecido tiempo atrás. Se suceden frases encabezadas por 'antes tal' o 'antes cual' que, más que denostar el presente, pretenden resaltar un pasado cuyo principal valor consistía en la mocedad del disertador protagonista en ese 'antes' que rememora. En este sentido, escuché un chascarrillo que 'se non è vero è ben trovato'. Una octogenaria, incómoda ante lo que consideró una falta de respeto, espetó enojada el latiguillo 'con Franco se vivía mejor'. 'Claro –replicó su acompañante antes de soltar una mordaz carcajada–, no teníamos apenas obligaciones, nos invitaban a las fiestas, bailábamos y, sobre todo, no nos dolía nada'.

martes, 21 de noviembre de 2023

GRACIAS, ALFONSO. FIRMADO: PEDRO

Resuelto el sudoku ministerial como trámite que zanja el interminable ciclo electoral, Pedro Sánchez, satisfecho, relajado, resuelto, sonríe. Llegado hasta aquí, sin saber cómo -o sabiéndolo tan solo él: al principio del verano nadie de los demás auguraba tal desenlace- se dispone a enviar notas de agradecimiento a cuantas personas han colaborado en que lo imprevisible se haya consumado. De repente, bolígrafo en mano, papel en blanco sobre la mesa, una maldad le atraviesa la sesera: “¿Y si le mando una nota de gratitud a Mañueco?”.

Sin él, asume Sánchez, la historia se hubiera deslizado por otros caminos que difícilmente hubieran llegado a este mismo pueblo. El destino de aquel adelanto electoral del (ya lejanísimo) 2022, inducido altaneramente para desembarazarse del lastre de Ciudadanos y emerger en solitario, propició el matrimonio de conveniencia del PP con VOX. Lo que entonces se pudo entender como un hecho coyuntural armonizó la sintonía venidera. Si Mañueco, asumiendo el gobierno regional con la fortaleza que exige la debilidad, se hubiera resistido, Feijóo (con tilde en la primera ‘o’) habría encontrado argumentos para, al menos, pausar sus acuerdos voxianos tras las municipales y autonómicas del mayo pasado. El discurso diferenciador de María Guardiola, la del ‘de ninguna manera’ como preludio al ‘sí quiero’, habría tenido eco, hasta alguna credibilidad. Las huestes de Abascal, en paralelo, de haber recibido el ‘no’ de Mañueco, habrían vociferado más al admitir su intrascendente papel.

domingo, 19 de noviembre de 2023

FUERTE SOLO ANTE LOS DÉBILES

Sea porque su propia mediocridad, para disimular el escaso mérito que Fulano de Tal reúne, le impele tanto a adular a los que certifica superiores en sus bien grabadas escalas jerárquicas –laborales, sociales, económicas...– como a despreciar a los últimos de idénticas gradaciones; sea porque su propia vulgaridad, por manifiesta incapacidad para valorar lo que desprecia, desdeñe cualquier virtud ajena, no consienta reconocer un mérito al que él mismo rehusó por desdén; sea porque su propio arribismo, para acceder al peldaño que es consciente de que legítimamente no alcanzaría, le fuerce sonrisas vasallas, le imponga aspavientos jactanciosos; sea por fatuidad, cretinez, altanería, descaste... un sinnúmero de Fulanos de Tal muestra su arrogancia ante las personas más necesitadas a la par que macera su temperamento, incluso yendo más allá de lo que se le requeriría, cuando cualquier poderoso les demanda sumisión. Fuertes con los débiles, débil ante los fuertes.

Pocos, por el contrario, invierten dichos comportamientos, fuertes frente a los fuertes, débiles ante los débiles, hasta el punto de exprimirse una fuerza interior de la que aparentemente carecían para enfrentarse a quienes mandan, de ahormar dosis de suave ternura para entregársela a los que de apenas nada disponen.

lunes, 13 de noviembre de 2023

CASUALIDADES Y CAUSALIDADES

Supongo, con certeza no lo sé, que en algún capítulo de Barrio Sésamo, Coco, el superhéroe particular de nuestra generación, desentrañaría la desemejanza entre 'antes' y 'después' a la manera en que nos explicó, esto sí a buen seguro, las diferencias entre 'arriba' y 'abajo' o 'cerca' y 'lejos'. Teniendo claro que lo que sucede antes acontece antes de lo que sobreviene después y viceversa, queda pendiente establecer si tales aconteceres se suceden, como tierra que se moja tras la lluvia, inexorablemente yuxtapuestos por algún tipo de relación o sin más coinciden como dos vecinos en la puerta del ascensor. Hablamos de 'causalidad', en el primer caso; en el segundo, cuando la consecutividad no implica relación, de 'casualidad'. El problema se presenta cuando, ante hechos contiguos, no encontramos manera de asegurar el estante relacional en que debemos colocarlos. Fundamentalmente ante sucesos que no se pueden repetir: no hay manera de encontrar pautas, de atestiguar fehacientemente la existencia de estas.
Probemos. Resulta obvio, desde antes incluso de comenzar el partido de Santander, que la presencia en el campo de Moro y Kenedy le aporta al Pucela un fuste ofensivo, una calidad en el regate, una imprevisibilidad en el ataque, muy superior al que puede ofrecer cualquier otro jugador disponible de la plantilla. Colocaremos el 'que la remontada final se produjese con ambos protagonistas en el campo' en la balda de la causalidad.

miércoles, 8 de noviembre de 2023

COSAS DE LA CATENARIA

Los días del fin de semana despejados de nubes y labor los ocupo con paseos en bici por diversos pueblos. A principios de septiembre, un problema de salud de un familiar -bien resuelto, gracias- me condujo a Ávila en alguna ocasión, razón por la cual, descartado el coche -no sé conducir-, solicité un abono ferroviario. Mezclando los dos ingredientes, bici y abono, me propuse ponerme al día con mi provincia de origen. Sustituí temporalmente los Torozos y los valles del Duero o Esgueva por la Sierra de Ávila y el Valle Amblés. Contaba con la posibilidad de pinchazos o averías, pero de la bici, no del tren. Y fue lo que el domingo ocurrió. Por un destrozo en una catenaria, mi tren de vuelta quedó varado en Medina del Campo, regalándome tres horas para evocar, observar y escuchar. Evocar las mil vivencias de cuando en esa estación hubo bullicio, trasiego, bar… Ahora, apenas, o ni eso, una triste máquina de refrescos. Observar media docena de monjas, mayores las españolas, llegadas de Filipinas, Kenia o Vietnam, las no ya tan jóvenes; un chaval que huía, o retornaba ante la ausencia de expectativas, de Lavapiés a su pueblo en la Tierra de Campos leonesa; unas universitarias abulenses, cuyo futuro, a su pesar, pintaba menos abulense que sus actuales destinos, de camino a las clases del lunes. Escuchar a un sesentón bromear uniendo actualidad y coyuntura -“si los nacionalistas catalanes piden los rodalies, que Sánchez les diga que vale, a condición de que se queden con el resto de RENFE, a ver si así…”-, u ofreciendo comida a las monjas –“me vendían pan de La Hija de Dios (pueblo de Ávila) o de Martiherrero, y elegí Martiherrero. Es lo que hay”-.

lunes, 6 de noviembre de 2023

UN TRIUNFO "PARÁCLITO"

Mentiría si les dijese que las catequesis con don Rufino merecían la pena por cualquiera de los argumentos que impelen a un chaval a entender que el rato dedicado a algo le merece la pena. Ni a un chaval por el tiempo perdido ni al adulto en que se convirtió por el nulo valor de lo aprendido. Tediosas por fondo y forma, inoportunas por el día y la hora, desagradables por el gesto hosco, el tono áspero, la mirada desabrida del sacerdote... Íbamos porque había que ir si queríamos recibir propina. Íbamos porque había que ir si no queríamos recibir propina de la otra: varios azotes a sucesivas manos; que al pescozón, la bofetada o la palmada en el culo se podían apuntar el propio cura, tus padres o cualquier adulto que, por serlo, se sintiera con potestad para ello. Incluso yendo no era seguro evitar algún sopapo. Una de las escasas carcajadas que recuerdo languideció con el sonido de un sopapo de don Rufino en la cara de un mayor. Aquel percibió algún signo de desatención en el rostro risueño de este, de natural poco atento.