domingo, 14 de abril de 2024

NECESIDAD DE COMPLEMENTO

El humano aplica su pericia para innovar el mundo que le rodea, bien concibiendo y materializando flamantes utensilios, bien propiciando algún progreso en los útiles de los que ya disponía. En este segundo caso, ocurre con frecuencia que el producto mejorado adquiere una naturaleza propia que, sin despegarle definitivamente del objeto de partida, del significado, requiere complementar su significante. El lenguaje, por tanto, se ha de armonizar con esta nueva realidad conceptual. En principio, la labor de especificar le corresponde a un adjetivo, pero para estas cuestiones cotidianas recurrimos a un complemento preposicional que por si sólo auspicia y redobla la cara de encandilamiento de quien lo utiliza. Un balón cualquiera ya servía para atraer, embelesar y abrir el universo a cualquier criatura; un balón 'de reglamento' sublimaba las emociones. Una tele nos permitía emocionados responder «biennnnn» a la pregunta «¿cómo están ustedes», travesear con las diabluras insumisas de Pippi Långstrump, sufrir con las peripecias de un doliente Marco...; una tele 'en color' alzaba la fantasía hasta la altura del arcoíris.

martes, 9 de abril de 2024

LOS PEORES DE LA HISTORIA

Nunca salgo de un debate siendo idéntico al que era cuando entré en la conversación; nunca concluyo una lectura sin haber incorporado una nueva capa a mi ser; incluso, nunca cierro un artículo sin haberme modificado siquiera un poquito a lo largo de ese diálogo conmigo mismo, con las fuentes que me calan, en busca de los matices pertinentes. Pretendo no solo adquirir nuevos conocimientos sino comprender diferentes lógicas de pensamiento, de vida. Me muevo, me mueven, es así por más que mi vehemencia muestre una seguridad de la que carezco.

Cada vez me cuesta más. No tanto en la escritura. Escribir, al fin, lo hago solo, por lo que -dado que pretendo respetarme/respetarles y procuro, aunque supongo que no siempre lo consiga, aislar proceso y resultado de los virus del interés o la tendenciosidad- aún me pertenece. Sin embargo, en las conversaciones que tratan de algún asunto de relevancia social me topo con posturas herméticas, dictámenes sin pulir, sentencias que cobijan verdades parciales, verdades arrojadizas, mentiras, juicios sumarísimos al que contrapone una opinión desemejante.

lunes, 8 de abril de 2024

DE CUMPLE PADRE A CUMPLE MADRE

Antaño, para estimar la medida de cualquiera de las magnitudes físicas del elemento a calibrar, nuestros antepasados se servían de algún artilugio que tuvieran a mano para convertirlo en patrón. Una vara, un pie, una legua, un grano, los diferentes múltiplos de este... Al ardid, además de para computar longitudes, masas, superficies o capacidades, se recurría para medir el tiempo. Un huevo, en el reloj de mi abuela, no se cocía en nueve o diez minutos sino 'en un rosario'. El credo o la salve también le servían de patrón temporal. Esta manera de proceder se expandió desde su sentido literal hasta invadir terrenos del figurado, de forma que el lenguaje se enriqueció con símiles para denotar 'celeridad' –tarda menos que un cura loco en persignarse–, o un largo tiempo de espera –ocurre de higos a brevas–. De higos a brevas, no de brevas a higos, que el par de cosechas que producen las higueras, algunas, no reparten  el año en partes iguales. Los higos se producen a finales del verano. Ocurre que los primeros fríos otoñales impiden la maduración de los frutos pendientes. Comienza el ciclo largo. Estos higos, en vez de malograrse, hibernan hasta que les despiertan allá por mayo los calores de una bien entrada primavera en que se ofrecen convertidos en brevas. Poco hay que esperar, sin embargo, para la siguiente temporada de higos.

sábado, 30 de marzo de 2024

TRES MANZANAS, UNA FRUTA

Recapitulando sobre las preguntas formuladas en sus sucesivas comparecencias, rumiando el contenido de los textos detractores publicados en los diversos medios locales, ahuyentando el machacón cántico sentencioso que le exige marcharse, intuyendo los escarceos acusatorios que se desplazan de esquina en esquina, de barra de bar en barra de bar, de red social en red social, Pezzolano se mesará los cabellos pretendiendo penetrar en esas mentes pucelanas que le cuestionan haga lo que haga aunque en ese 'lo que haga' se incluya lo que le sugirieron hacer. ¿No era –se preguntará cabizbajo– que tras un buen resultado correspondía mantener el mismo bloque, proponer idéntico plan, no tocar lo que había funcionado?

martes, 26 de marzo de 2024

EL INTERÉS DE LA ZONA

El tedio, propensión de la que el cineasta pretende huir al abordar sus películas, se transforma en la clave emotiva que plantea Jonathan Glazer para desarrollar ‘La zona de interés’. Cada escena muestra la aburrida cotidianeidad de una familia, sus conversaciones triviales, sus cuidados del jardín, sus legañosas sonrisas al despertar, sus besos de buenas noches… Una familia absolutamente convencional, de las que cualquier vecino atestiguaría al periodista que le interroga tras un hecho truculento que ‘parecían buena gente’. Interés, per se, nulo hasta para el más puntilloso de los voyeristas. El desasosiego que provoca la visión parte de lo que no se muestra, de lo que sin aparecer en el cuadro percibimos que ocurre. No son necesarios ni los indicios -chimeneas, gritos-; de antemano nuestra cabeza nos refiere la historia colateral.

domingo, 24 de marzo de 2024

REMOS, ROMOS, RIMAS, RUMOS Y RUMAS

Remos. Instrumentos con los que, haciendo palanca en las aguas de los flancos, se propulsan las embarcaciones. También, al impulsar el vuelo de forma similar, reciben tal nombre las alas de las aves. Como podrían recibirlo, por su desempeño, los extremos de un equipo de futbol. Ni la portería que defienden se encuentra justo a sus espaldas, ni la que han de atacar se sitúa enfrente de ellos: se ven obligados a observar el juego, además de levantando, girando la cabeza. Pegaditos a la línea de cal, pudiendo acariciar el agua del exterior del campo con solo estirar el brazo, impelen el juego ofensivo del equipo lanzándose al abordaje desde esos páramos de reducida densidad de población. Cuando no parte de una decisión del entrenador, la propia realidad –Moro delicado por recién recuperado, Amath desconvocado por lesión traidora, Biuk alejado del escenario por convocatoria de la selección– se impone. Parece requerirse una conjunción astral para que el Pucela disponga a la vez de una pareja de remos.

lunes, 18 de marzo de 2024

LAS PIEDRECILLAS INSUPERABLES

Con asiduidad, cuando se observa que algún reguero de agua discurre turbio, se recurre al «¿En qué momento se había jodido el Perú?», la pregunta que atormentaba a Santiago Zavala desde el arranque de 'Conversación en La Catedral', la novela, tercera suya, quinta mía –la publicó en 1969–, de Mario Vargas Llosa. Debe de ser porque en el pueblo de mi infancia –matizo con 'de mi infancia' no debido a que posteriormente dejara de sentirlo como propio, sino asumiendo que el pueblo en el que se desliza la niñez se conforma como un escenario con identidad propia– contaba más pocilgas que catedrales, porque cuando superé la media docena de palmos de altura me encargué de adecentar más cochiqueras que ábsides, acarreé más panija que velas, rellené más pesebres que patenas; prefiero echar mano de la manera en que Cantinflas en 'El padrecito' –«Ahí es donde la puerca torció el rabo»– señala ese momento crítico, ese punto, acaso imperceptible, en que se empezó a complicar, acaso definitivamente, el retorno al sendero virtuoso.

miércoles, 13 de marzo de 2024

LOS TIEMPOS DICTAN LO RAZONABLE

En una sentencia, con aire de certeza axiomática, con intenso aroma jactancioso, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, supongo que en calidad de ministra de Trabajo, proclamó: “No es razonable un país que tiene abiertos sus restaurantes a la una de la madrugada”. Supongo que en calidad de ministra de Trabajo lo expuso y, así entendido, vislumbro una crítica/denuncia al respecto de las condiciones laborales asumidas, qué remedio, por el personal que atiende en estos establecimientos, del alargamiento arbitrario sin recompensa de las jornadas de trabajo. De ser así, insisto, yerra en el enfoque: no será responsable del ‘desatino’ el capricho de los comensales sino la falta de adecuación -en términos de contratación- de la oferta a la demanda y la incapacidad de un control riguroso –materia que le compete a la vicepresidenta- que impida, en lo posible, tales abusos. Yerra, insisto, de ser así, también por la generalización latente.

sábado, 9 de marzo de 2024

EL SILENCIO DE LAS SIETE TROMPETAS

Cada vez que mi dispersión me ladea la atención dirigiéndola a cualquier línea tangencial al propio desarrollo de los partidos del Pucela, mis sufridores Yepes y De Pablos me reconvienen para que me centre y focalice la mirada en el partido de turno. Uno u otro, indistintamente, recurren a su gracejo para atizarme.

–Mira el Robledo, no se percata de nada. Luego escribirá no sé qué de 'Amanece que no es poco': que si todos somos contingentes, que si un hombre en la cama es un hombre en la cama,...; y parecerá hasta que ha estado pendiente.