lunes, 1 de septiembre de 2008

TIEMPOS ¿MODERNOS?

No hemos tenido que esperar. Primera jornada, primer apagón y el R. Valladolid como protagonista. Es el sino de un tiempo, el nuestro, en el que la voluntad de casi todos está supeditada al designio de quienes detentan el mango de la sartén. Unos pocos mandan y el resto pagamos sus ambiciones, sus caprichos o sus enfrentamientos.
Los intereses de dos grandes grupos empresariales colisionaron en su afán por adueñarse de las retransmisiones del fútbol y como consecuencia no pudimos ver el arranque liguero de un R. Valladolid cuyos resultados en la pretemporada habían cargado de ilusión las alforjas de los aficionados. Una guerra que les afecta sólo a ellos impidió, como efecto colateral, que comprobásemos si ese estado de gracia se iba a mantener o la competición oficial nos devolvería a la cruda realidad.