Aviso de antemano: si en una de estas me da un vahído en plena calle y me
encuentran por ahí tumbado, no me importa que ustedes se reúnan formando
asamblea, que se alineen, se dispongan en círculo o en romboide; que pretendan
interpretar qué me ha podido ocurrir para desvanecerme de ese modo y aporten
sus hipótesis, si pudo ser un infarto de miocardio, un episodio de epilepsia,
un ataque de ansiedad o, incluso, un mareo derivado de un supuesto embarazo;
que lancen al aire las recomendaciones, ya saben, una pastilla de
nitroglicerina debajo de la lengua, un palo en la boca para que no me asfixie o
un poco de tranquilidad que ya se pasará; que voten entre las opciones
propuestas, ya sea en la misma papeleta o en votaciones separadas, sobre qué es
lo que me ha ocurrido y cuál es el mejor tratamiento… De verdad, no me importa
todo eso, pero por favor, si por una de estas me encuentran inconsciente,
desmayado en la calle…hagan caso a lo que dice el médico.