El principio de este artículo es el certificado del fin de una
etapa. No hay más, este ciclo en la calle de la vanidad se da por concluido. La
desolación de la imagen convierte las palabras de este artículo en poco más que
un susurro: transforma el estruendo que puede suponer un artículo en una
vocecita callada que se esfuerza en no hurgar en una herida que aún supura, que
pretende no obstruir los conductos por los que se desplaza el silencio del
duelo que se vislumbra. Nacho caminando cabizbajo y El Yamiq doblado formando
un ángulo recto muestran la asunción del drama deportivo que acechaba. Son
circunstancialmente dos de los once que estaban en el campo en ese preciso
instante, dos de los veintitantos de la plantilla, cualquier otro transmitiría
una sensación idéntica. Si estirásemos el radio hasta formar un círculo que le
englobe a usted, aficionado raso, tres cuartos de lo mismo. Nadie se salva del
pellizco emocional cuando la esperanza ha quedado atrás. Por más que desde
antes del óbito se diese por admitida la realidad.