Discúlpenme por no ofrecerles la referencia exacta, el cierre atosiga, el tiempo apremia. Ni siquiera recuerdo si el hecho ocurrió en la realidad o se trata de un relato literario que vagamente conservo el algún vasar de mi memoria. Sucedió que un equipo dispuso en un mismo partido de cinco penaltis, acaeció que erraron los cuatro primeros. Fue tal la ofuscación del equipo beneficiado – visto lo visto quedaba en entredicho el beneficio– que, en cuanto señalaron el quinto, el capitán se acercó al árbitro y le solicitó, por favor, por favor, por favor, que les permitiese ejecutar un córner en lugar del lanzamiento franco desde los metros.
Blog sin más pretensión que la de poner un poco de orden en mi cabeza. Irán apareciendo los artículos que vaya publicando en diversos medios de comunicación y algunas reflexiones tomadas a vuelapluma. Aprovecharé para recopilar artículos publicados tiempo atrás.