En muchos casos, con las grandes obras de infraestructura
nos ocurre como con aquel acertijo infantil;
es difícil saber qué pasó antes, si fue el huevo de la necesidad el que empolló
la obra u ocurrió que la propia gallina de la obra fue dando forma a la
realidad social. El caso del AVE, por ejemplo, es paradigmático. Se vendió como
huevo, claro, eso ocurre siempre para conseguir el calor con el que se incube;
como ese bálsamo de fierabrás cuyas sinergias solucionarían hasta el hambre en
el mundo. Si los madrileños están a tiro de una hora, esto se habrá de llenar
de empresas que generarán puestos de trabajo y riqueza que dará forma a su vez
nuevas empresas y nuevos puestos de trabajo que… Hubo quien puso cifras,
Valladolid podrá llegar a los 700.000 habitantes. Ocurrió viceversa, como con
el autobús de mi pueblo; son muchas más las personas que salen a trabajar a la
capital del reino que las que vienen con idéntico propósito. Personas que
empiezan yendo y viniendo para terminar asentándose al sur de Guadarrama.