viernes, 3 de enero de 2020

LA ESPAÑA ROJIRROTA

Foto "El Norte de Castilla" 
No digo que la Tierra vaya a dejar de dar vueltas al Sol, que eso seguirá siendo mientras nuestra estrella siga ahí como centro gravitatorio. Tampoco, Dios me libre, que en los próximos 365 días vayamos a palmar todos: aunque no faltará alguna localidad en la que el adjetivo 'vacío' salte del terreno de las metáforas al de la perfecta definición, el conjunto de los vivos en nuestro país se mantendrá en sus muchos millones. No, afirmo, sin más, que, a tenor de una corriente ciertamente numerosa -aunque incuantificada, no sabemos si se compone del 15, del 25…o del 93,48%-, esta ha sido la última Nochevieja en España. A partir de ya, en cuanto el gobierno que se avista tome posesión, será el llanto y el crujir de dientes. Para dentro de un año, o bien mandan los separatistas y no quedará España o se imponen los rojos y, a falta de lechazo, champán y uvas, nada podremos celebrar. Eso, sin descartar que ya no quepa especulación acerca de si la catástrofe vendrá por el puerto de la ruptura o aterrizará en el aeródromo de la rojura: en doce meses ‘los traidores’, al alimón, son capaces de perfilar una España rojirrota.