De un tiempo a esta parte –tal vez el asunto lleve años asentado y no me había percatado– encuentro en el supermercado, compartiendo estante con las históricas cajas de docena, huevos empaquetados en envases de diez. Será, me malicio, una treta –en realidad, una forma de autoengaño– para aparentar una reducción de precio o encubrir la carestía. Será, entro en modo aritmético, un intento de adecuación al imperante sistema decimal. Me lo niego, el 'doce' resistirá como referente contable, siquiera sea para referirnos a pasteles, cervezas o huevos, porque admite el reparto en partidas de dos, tres, cuatro... o seis, tan es así que hasta hemos anclado en nuestro cerebro el concepto 'media docena'.
Blog sin más pretensión que la de poner un poco de orden en mi cabeza. Irán apareciendo los artículos que vaya publicando en diversos medios de comunicación y algunas reflexiones tomadas a vuelapluma. Aprovecharé para recopilar artículos publicados tiempo atrás.