jueves, 13 de diciembre de 2018

HACIA ALGÚN LUGAR

Imagen tomada de noticiasdealava.eus

Del futuro nunca se supo mucho, pero ahora no sabemos nada. Las incertidumbres pasadas parecen hoy poca cosa comparadas con los desasosiegos presentes. Se lució el tal Francis Fukuyama cuando, a principios de la década de los noventa del siglo pasado, tras la caída del bloque soviético, auguró el fin de la historia entendida esta como lucha de ideologías. El politólogo estadounidense, subido sobre la cresta de aquella ola de la aparentemente triunfante democracia liberal, entonó un réquiem por el resto de doctrinas políticas fenecidas a lo largo del siglo que concluía. Sin rival, el modelo imperante habría de extenderse por los siglos de los siglos amén para derramar paz y prosperidad a este errante mundo.

martes, 11 de diciembre de 2018

COMO ERA POSIBLE, LO HICIERON

Foto El Norte
Al sacerdote, embebido por la poética belleza del Magnificat, se le calentó un poco la boca. Así, al menos, lo entendió uno de los feligreses al que en el barrio le conocían como 'Patajunco' desde aquel maldito día en que, aún niño, sufrió un ataque de poliomielitis. El cura, ya digo, absorto, fuera de sí, con los ojos cerrados, recitaba aquellos versos con los que, según el Evangelio de Lucas, María, la que al poco habría de ser la madre del hijo de Dios, saludaba a su prima Isabel. «Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí». De la misma manera, continuaba el clérigo, todos somos depositarios de esta misma gracia, todos podemos decir, como María, que el Señor obró en cada uno de nosotros maravillas. 'Patajunco', anclado en su silla de ruedas desde aquel infausto episodio, sin apenas fuerza en los brazos, no se contuvo y, aunque de esta no quedase más que un hilillo, dejó escuchar su voz en forma de pregunta retórica.

jueves, 6 de diciembre de 2018

LAS CÓMODAS BURBUJAS

A veces me da por pensar que lo que políticamente se denominó la izquierda empezó a irse al garete en el mismo momento en que se inauguró el primer bar en que se organizaban charlas, se colgaban exposiciones o se representaban profundas dramaturgias. A partir de ahí, el asunto cuajó en moda. Las intenciones iniciales -creación de espacios en los que personas con una visión semejante del mundo pudiera encontrarse, debatir y proponer- no parecían desenfocadas,  incluso se puede decir que cumplieron su cometido, que fueron eficaces. Pero el tiempo, que degenera todo lo que no es capaz de reinventarse, provocó un efecto ‘capilla’, convirtió estos espacios en motores de autoafirmación, en turbinas que retroalimentan...

domingo, 2 de diciembre de 2018

DEFINICIÓN DE AMIGO

Foto El Norte
El fenómeno de la erosión afecta también al lenguaje y por ello existen frases que nos resultan cansinas: expresiones que en algún momento tuvieron sentido, hicieron gracia y cuajaron pero que, tiempo después, nos suenan desgastadas.
Otras expresiones, sin embargo, son como el diamante: no hay manera de que el tiempo las aje de forma que, traídas a cuenta cuando la ocasión lo requiere, siempre resultan oportunas. Uno de estos dichos es el que define a los amigos como esas personas que están (también) en los peores momentos, que aparecen en esas circunstancias en las que ellos no tienen nada que ganar pero deciden hacer acto de presencia  para compartir la carga.
Pero tal es la dureza de estas últimas frases que con su punta, también como el diamante, pueden cortar todos los materiales que se le pongan por delante. Ocurre cuando las utilizamos como dogmas arrojadizos y juzgamos a través de ellas sin entender bien las circunstancias que concurrieron para que las cosas sucedieran como sucedieron. Desde luego, si actuase con esa ligereza, Jordi Masip hubiera podido presentar anoche esta foto en casa.
-Solo, me dejaron completamente solo y vendido.

jueves, 29 de noviembre de 2018

MARICÓN Y SOCIALISTA

Imagen tomada de eldiario.es

Menos mal que tuvo la fortuna de nacer en Madrid, tierra sin sospecha; porque si el profesor Alfredo Corell fuese oriundo, pongamos por caso, de Vilanova i la Geltrú, el cobarde afiche aparecido repetidamente en la Facultad de Medicina de Valladolid habría incorporado el adjetivo ‘CATALÁN’ al binomio que forman ‘MARICON’ -así, sin tilde ni nada- y ‘SOCIALISTA’. En ningún caso sería necesario añadir ‘ATEO’, estaríamos ante una redundancia, pues para mentes como la del autor del cartel, lo de renegado de la fe verdadera va de suyo, aparece implícito tanto en maricón como en socialista.
Cada adjetivo de aquellos, por sí solo, tiene su propio valor, pero en el momento en que aparecen cogidos de la mano pierden su concreta esencia para convertirse en el negativo de una definición. A un socialista, si no lo es mucho, ya me entienden, que no sea ‘maricón’ se le tolera. A un ‘maricón’, si no lo es mucho, ya me entienden, se le soporta. Pero maricón y socialista, agarraditos en el mismo cartel, no pretenden especificar nada sobre la sexualidad ni la ideología del interpelado sino apuntar que debido a aquellas condiciones, por otra parte seguramente ya sabidas, no es digno de formar parte de un determinado `nosotros’ normalmente de carácter nacional. Precisamente por eso, porque ambos adjetivos abren y cierran una elipsis intimidatoria -por rojo y maricón fue asesinado Federico García Lorca- el cartel se convierte en amenaza, asusta. Y asusta más, claro, si los no interpelados directamente callan.

lunes, 26 de noviembre de 2018

ROMANCE SONÁMBULO

Foto El Norte
Cada cosa parece en su sitio, “el barco sobre la mar y el caballo en la montaña”. Pero así, con cada pieza académicamente en su sitio, pese a la armonía del funcionamiento colectivo del equipo, parece que no llega para conseguir in triunfo que se va resistiendo. Es en esos momentos cuando Sergio “con la sombra en la cintura […] sueña en su baranda, verde carne, pelo verde con ojos de fría plata”. Sus compañeros entonces se agarran al asa de la esperanza “Verde que te quiero verde” en forma de un chut que desbarate el armazón defensivo del rival. “Verde viento” Daniele coge el balón, sabes que va a disparar, lo sabes tú, lo sabe el compañero, lo sabe el rival y, a pesar de todo, no hay forma de evitarlo, “Verdes ramas”, lo hace. De momento, dos en copa, uno en liga, sus zarpazos “la higuera frota su viento” acabaron en la red. El resto dejaron un ¡uy! y un lamento, las manos al alto, “compadre, vengo sangrando desde los montes de Cabra”.

jueves, 22 de noviembre de 2018

TIRADA DE 32

Echamos años para adelante como sin mirar, nos ponemos a hablar de 2050 como si fuera a llegar mañana mismo y pudiéramos ver lo que en tal fecha haya de ocurrir solo con doblar la esquina. El gobierno, el actual, el de noviembre de 2018, el que no tenemos seguro que se vaya a mantener a lo largo de todo el año que viene, plantea una fecha, 2050, de la misma manera que podría haber escrito 2047 o 2052, como límite para la circulación por las carreteras españolas de coches con motor de combustión interna. Los fabricantes de coches ponen el grito en el cielo lanzando al aire tremendos augurios. Y nos ponemos a pensar a 32 años vista, eso sí,  sin dejar de mirar la calle del hoy, para encontrar las disonancias y concluir: imposible, será la ruina.

jueves, 15 de noviembre de 2018

DE MILES EN MILES

Imagen tomada de hogarmania.com

Si algo sabemos de trigonometría, si somos capaces de entender qué es un hiato o si recordamos que a los reyes de la dinastía de los Habsburgo se les dividía en Austrias mayores y menores, se lo debemos en mayor medida a las vacas, cerdos y ovejas que a nuestras multicentenarias universidades. Con su leche, su carne, su lana -unido al ingente trabajo de nuestros padres- se pudieron pagar los estudios de varias generaciones, estudios que habrían de servirnos para aquel etéreo ‘ser algo en la vida’, para aquel concreto ‘no tener que trabajar y sufrir tanto como nosotros’. 
Quien ha visto llorar a su madre por una gallina que se ahogaba o lanzar juramentos al aire ante una vaca recién parida a la que se la habían salido ‘las madres’ es consciente del peso que en nuestras vidas ha tenido esa ganadería ‘de pocas en pocas’, alguna vaquilla en la cuadra, algún cerdo en la pocilga o un pequeño rebaño al que pastorear. Cosas de la vida, esos mismos animales, con pagarnos los estudios, pusieron fin a los tiempos de las cuadras, las pocilgas y las cijas. 

domingo, 11 de noviembre de 2018

Y AÚN DICEN QUE UN PUNTO ES CARO

Foto El Norte
Pascualet se debate entre la vida y la muerte en la bodega de un barcucho. Un compañero le sujeta por los brazos mientras permite que su pierna sirva de apoyo al moribundo. Otro le palpa el pecho con el anhelo de encontrar un hálito de vida al que agarrarse. Pascualet es poco más que un muchacho, pero ya ha tragado mil y una veces las hieles a las que la vida invita en casa de los pobres. Ahora, ya digo, con fechas aún pendientes para llegar a adulto, la vida se le va. Así, con esa crudeza relataba el joven Sorolla con sus pinceles la dureza del día a día de los pescadores. Una escena que describió previamente Vicente Blasco Ibáñez en la novela «Flor de Mayo». Allí, en esas páginas conocemos más personajes.