Apenas veinte minutos necesitó el Pucela para que aquello quedara en accidente. Un vendaval logró un par de goles y alguno más que pudo ser. Incluido uno de los de ‘sí o sí’ que fue ‘no’ por impericia de Toni. El chico nos deslumbra, a mí me tiene ganado desde antes de irse cedido, pero en las inmediaciones del marco ocurre que sobra ‘pensar’, lo mismo que unos metros por detrás del área aporta valor al murciano. Ahí no hay margen. Los delanteros, ante la portería, dinamitan por puro instinto. A Toni, en lo que decidía cuál era la mejor opción de las diez que se le ocurrían, se le acabó el tiempo.
Blog sin más pretensión que la de poner un poco de orden en mi cabeza. Irán apareciendo los artículos que vaya publicando en diversos medios de comunicación y algunas reflexiones tomadas a vuelapluma. Aprovecharé para recopilar artículos publicados tiempo atrás.
lunes, 28 de febrero de 2022
CUENTA DE ORGULLO SALDADA
miércoles, 23 de febrero de 2022
BENDITA ESPAÑA
En todo terreno que se precie, arribismo y jugadores de ventaja brotan como flores silvestres. En política, más. Limitándose a escuchar el zumbido de la cutre movida del Partido Popular, Sánchez podría pensar que el momento es óptimo para convocar elecciones, que su rival nunca estará más débil, que si le da tiempo podría aprovecharlo para recomponerse y ¡vete tú a saber!
Aparte de mostrar ventajismo, se equivocaría. Su rival no es el PP sino la derecha que aún considera izquierda al PSOE. Varios millones. Por más que aquel se autodestruya, su espacio se recompondrá: nunca faltará un relevo depositario de su caudal de votos. Menos, cuando la suma de rivalidades ‘derechiles’ ha avivado su movilización.
sábado, 19 de febrero de 2022
EL PUCELA DE BRONSTED Y LOWRY
Los patrones del juego de ataque del Real Valladolid, Aguado y Roque Mesa, se comportan como un ácido tan fuerte como el clorhídrico, el sulfúrico o el nítrico. Son profundamente corrosivos cuando entran en contacto con el entramado defensivo rival, se disocian completamente con la sola presencia de la humedad del césped, liberan el balón como si fuera un ion de hidrógeno para uso y disfrute de sus compañeros y conducen la energía de un punto a otro del terreno de juego.
domingo, 13 de febrero de 2022
EN EL CAMINO ESTÁ EL PLACER
No sé si el Valladolid logrará el ascenso. No me importa. Bueno, no me da igual que ascienda o no, me es indiferente que lo logre para reconocer que me encanta lo que veo cuando juega como local, para ensalzar el camino elegido. El Pucela encadena en Zorrilla casi una docena de demostraciones de buen fútbol. Falta que fuera de casa la imagen se acerque. Si es por el ruido del público, que los jugadores se lo pongan grabado.
miércoles, 9 de febrero de 2022
SI ES HUÉRFANA, ES DERROTA
Nadie es Mañueco, responsable civil, bien directo por
pertenencia, bien subsidiario por acarrear las mismas siglas, de los gobiernos
de la comunidad de los siete lustros que nos anteceden.
Mañueco no es Sánchez. Con eso le da para rehuirse, para prometer como si fuera un recién llegado, para presentarse como alternativa. Fin.
lunes, 7 de febrero de 2022
UNO MÁS UNO, UNO
El fútbol, crisol social o reflejo humano que nunca vive aislado de lo que acontece, también ha sido invadido por intensas hordas de cifras, el ‘big data’. No lo denuesto, faltaría más, claro que son de gran ayuda; sugiero que por sí solos, que sin un buen ojo que los interprete, dicen menos de lo que parece. No me vale comparar los números de Anuar con los de Aguado, podrían ser hasta idénticos, pero el uno nunca podrá interpretar el papel del otro. La imaginación es, por propia definición, imprevisible, y les diferencia. La elección de jugador implica un cambio drástico de modelo. Eso, y ahí está la clave, repercute en los demás. José Agustín Goytisolo, en ‘Palabras para Julia’, ya nos dejó dicho que “un hombre solo, una mujer, así tomados de uno en uno, son como polvo, no son nada”. Aserto que sirve para un futbolista. Sus números poco valen si su participación cercena el aporte de los compañeros. Los datos de uno valen para entender algo; pero, para cuantificar el peso de tal jugador, habrá que cruzarlos con los de otro. A su vez, medir la influencia de la variación de los de este en un tercero y así hasta completar el once.