domingo, 10 de marzo de 2013

BILLETES FALSOS DE JEQUE

No lograron su objetivo porque, cuando habían conseguido una réplica perfecta de los billetes de dólar americano, los aliados estaban a las puertas de Berlín. La operación Bernhard moría por falta de tiempo para ponerla en marcha. Un grupo de prisioneros encerrados en campos de concentración son seleccionados por los jerarcas nazis por su especial habilidad en cualquiera de las ramas de la impresión. En un primer momento les piden que ‘fabriquen’  libras esterlinas para, por exceso de dinero, poder hundir la economía británica. Consiguen la libra pero no es suficiente, el enemigo ya no es Inglaterra sino los Estados Unidos. Segunda exigencia: hay que fabricar dólares. A  Salomon Sorowitsch, el prisionero que dirige la parte técnica de la operación, le fascina el plan. Él era un falsificador profesional y la moneda americana era su asignatura pendiente. El reto, ahora con todos los medios a su disposición, le estimula, pero, poco a poco, va siendo consciente de que su éxito personal conllevaría una ayuda trascendental para los nazis. La contradicción entre el orgullo y el deber la resuelve ralentizando la operación hasta el límite, impidiendo, de esta manera, que los USA murieran con los dólares al cuello. Esta historia real es la base en la que se inspiró Stefan Ruzowitzky para rodar en 2007 ‘Los falsificadores’.