martes, 20 de marzo de 2018

SE NON È VERO, È BEN TROVATO

A lo largo de la historia, la mentira siempre fue utilizada como arma de guerra. Tan es así, que ya en los inicios de la Grecia clásica, y hace de ello más de dos mil quinientos años, el dramaturgo Esquilo de Eleusis dejó escrito que «La verdad es la primera víctima de la guerra». La mentira bélica tenía como objeto que el enemigo tomase decisiones erróneas al creer que las cosas eran de manera distinta a la que en realidad eran. Con engaños de este pelo, Alejandro Magno cruzó el Hidaspes y venció a las tropas del rey Poros o las tropas aliadas pudieron desembarcar en las playas de Normandía.