jueves, 1 de octubre de 2015

EL PODER COMO EL PERICO

En aquel año, a la vez que Barcelona lucía orgullosa sus galas de sede olímpica, cinco mozos de la periferia de la capital vallisoletana, Chema, Miguel, Jesús, Carlos y José Alberto se subían a los escenarios para presentarnos su primer trabajo discográfico. Juntos formaban ‘Imperativo legal’ y pregonaban, no menos orgullosos, su condición en el título de ese disco primogénito. Eran ‘De barrio’ y así nos lo querían hacer saber. En una de esas canciones cuentan la triste historia del enganche al ‘perico’ de una tal Perica. Desde que “el perico a la Perica le corriera por las venas, el amor se convirtió en un desastre que no llegaba a ninguna parte”. Así “atrapada y sin salida, la Perica estaba perdida”.
El poder produce un enganche que no tiene por menos al del perico y lleva, de la misma manera, a comportamientos contra natura para que la dosis siga llegando. Artur Mas, poder en vena desde el principio de los tiempos, no es el Braveheart libertador de su pueblo, es, sin más, un político conservador al uso, cuya propensión natural tiende a ponerse a favor de corriente.