domingo, 27 de marzo de 2022

REGALO DE CALENDARIO

La contestación a un ¿qué tal?, la respuesta sincera, no una por compromiso, se adecúa al contexto. Tras cojear, puedes decir que tus sensaciones en la pierna son estupendas. Claro está, puedes si tras salir del 'fisio', la pregunta te la hace el traumatólogo que hace seguimiento de tu doble fractura de tibia. Más o menos así, renqueando, caminaba el Pucela a la salida de Santo Domingo. Menos mal que el calendario le regaló una prueba flojita, porque no estaba para grandes brincos.

La superó, pero insisto, como quien cumple con las propuestas del fisio: despacito y sin alardes. Pacheta, consciente de la situación –supongo que tras haber estudiado vídeos que mostraban que el daño que le infligían los últimos rivales partía inexorablemente de la espalda desocupada de Mesa y Aguado–, pretendió cubrir el hueco y modificó todo el dispositivo. Una decisión de esas por las que, si sale bien, te consideran genio. Ahora, si acaba en pifostio, te las llevas de todos los colores. El resultado y el juego hablaron en sentido opuesto: el primero fue bueno; el segundo, no tanto. Pacheta dio una vuelta a su revuelta; a la vuelta del descanso propuso un plan C tras el fallido B al que el entrenador pucelano había negado su existencia.