sábado, 6 de marzo de 2021

TRIUNFO EN ‘HOUSE’

Desde el marzo pasado ando sin tele. Bueno, tele hay, lo que falta es un mando para sintonizar el TDT. Previamente, me limitaba a los canales básicos, los de gratis. Antes de la desconexión, y después también, varios amigos me ofrecieron acceso a diversas plataformas de pago. Siempre dije ‘no’. Prefiero -decía tras darles las gracias- vivir sin tele. No lo entiendan como una declaración fatua de superioridad moral; no es sino una asunción de mi debilidad, de mi incapacidad para decirme ‘no’. La misma flojera de espíritu que me impide comprar más jamón del razonable para comer en una tarde. Hasta que las restricciones debido a la COVID y la necesidad de ver los partidos del Pucela no me dejaron otra. Al principio, ‘los Robles’ cubrió el vacío del no poder acudir al estadio o a la redacción. Cuando tampoco se pudo ir a ‘los Robles’ tuve que revocar el no a Ana y Pipi, que ofrecían futbol en el lote. Claro, con la puerta abierta (Ana, Pipi, cielos) pues me puse con partidos de otros equipos… y con House.