jueves, 5 de septiembre de 2002

IVÁN, IVÁN, IVÁN DE LA PEÑA

Hemos tenido que esperar tres meses para disfrutarle, de nuevo, en su hábitat natural: el rectángulo verde de los sueños. Una especie depredadora, el entrenador, le acecha y sólo permite que de tanto en tanto se le vea como a los indios en una reserva o a ciertas especies animales en un parque zoológico. 
Él pertenece a una especie sospechosa por abrumador talento, peligrosa por cuestionar lo incuestionable, inadmisible por no ejecutar lo previsible, reo por realizar lo sorprendente. Quién con sus pases cuestiona al encefalograma plano del entrenador, que quiere futbolistas de producción en cadena, ha de ser castigado.
En el fondo estamos topando ante el mundo que se impone. Engordamos rápido a las vacas, destruimos el Amazonas, llenamos nuestro estómago de comida basura (como nuestros contratos) y follamos “aquí te pillo, aquí te mato”. Iván, con su fútbol, es un subversivo, una especie de Subcomandante Marcos. Sus pases inquietan como inquietaba García Lorca con sus versos.
Y si el panorama se oscurece, no lo duden, más policía. Hablarán de eficacia.

lunes, 2 de septiembre de 2002

14 DE ABRIL

Estadio de Montjuich. Año 1936. España-Alemania. Suena el himno alemán. Los once levantan la mano para realizar el saludo fascista. Suena el español (de Riego) y el capitán, Ricardo Zamora, levanta el puño y a su vez el resto de los componentes del combinado hispano se adornan con el mismo gesto de orgullo desafiante al totalitarismo. Ninguna otra imagen representa la belleza de esa niña, nacida un 14 de abril, vilmente torturada y asesinada antes de llegar a la pubertad. ¡Qué gran mujer podría ser hoy!. Engendrada con entusiasmo, nacida con dolor e ilusión a partes iguales, predestinada a morir destripada por los mismos brazos enarbolados por los alemanes, el puño del fascismo totalitario bajo el guante púrpura de la iglesia de los Segura y Gomá. Los jinetes totalitarios creyeron que, con la niña, moría el sueño de una sociedad libre pero los sueños están para crecer entre las plagas. La niña, el puño en alto de Zamora, representan, más allá de una forma de gobierno, el anhelo de una verdadera emancipación del estado muy lejos de la imagen del presidente de esta comunidad presidiendo actos religiosos. ¡Qué falta de cultura laica!. A dios lo que es de dios y al cesar lo que es del cesar. 

martes, 30 de julio de 2002

BASKONIA Y ALAVÉS

El próximo domingo se celebran, ya lo saben, elecciones en Euskadi. Como prólogo y epílogo dos clubes de esa tierra pueden marcar, sino lo han hecho ya, un hito en la historia del deporte vasco. Dan lustre a su talento con modestia, trabajo y un objetivo en el que todos se sienten corresponsables y por este camino están a un solo paso de alcanzar una cima en el deporte. Son dos proyectos consolidados con ambición, sensatez y eficacia que han conseguido formar un corpus indivisible con lo que es realmente un club: sus aficionados. Lo grande es que  los seguidores, vascos, se sienten representados en unos jugadores que llevan su nombre en las camisetas ( y esto no es metáfora). Pues bien,  estos deportistas que hacen grande a Euskadi son un ejemplo de globalización sin puertas en el estrecho, han nacido en los más variados rincones del orbe, de Uruguay a Lituania, de Estados unidos a Noruega. Y esa es la lección, un equipo, una sociedad se hace entre quien quiere hacerla. Y para eso es necesario sobreponerse a los instintos primarios. Y estos no sólo nacen de una parte.               

lunes, 29 de julio de 2002

DÍA SIN COCHE

Mientras los ciclistas trazan las últimas curvas por las rutas de España, otras bicicletas más modestas e igual de sacrificadas tratan de abrirse paso entre largas hileras de furiosos conductores cuyas meninges condicionan el uso de la bici a la práctica deportiva, pero nunca aceptarán que esas dos ruedas sean una alternativa seria de transporte. Es lógico, el coche es el estandarte de la libertad entendida como hecho personal y exigente de unos derechos, un campo abonado para comportamientos individualistas empapados de simpleza intelectual. La sutileza del discurso de la bici se adentra en otro plano, paralelo al anterior, del concepto de libertad, entendiéndola como un deber con los demás. Sin un cambio de actitud, asumido por buena parte de los que hoy se montan en el auto hasta para ir a mear, el día internacional sin coche se convierte en un día cargado de discursos hipócritas de políticos que no tienen el valor suficiente para tomar medidas de calado que recuperen la ciudad para sus gentes. 

martes, 30 de abril de 2002

PAUSA...POR FAVOR

No ha concluido el partido del sábado y, sin digerir, con el bocado en el esófago, ya tenemos otro plato servido para el martes. Deprisa, deprisa... El futbolista se hastía de fútbol y los aficionados, entre tanto plato, no somos capaces de separar la paja del grano. O quizá de tanto grano podemos llegar a la saciedad. Perdida la capacidad de fascinación queda el poso de la indigesta hartura. Y hartos, nuestro paladar no distingue un bocado de jamón y uno de mantequilla. Nos hemos dejado abrumar por unas circunstancias que nos arrastran hacia campos de fuerzas centrípetas capaces de expulsar al hombre a la periferia de su propio destino. Todo muy deprisa. Si paramos nos caemos como si nuestra cotidianidad fuese una bicicleta. Hemos caminado, caminamos, neuróticamente acelerados, generando riqueza para unos pocos, conformismo para otros y hambre para lo más. Recolocar al hombre en su sitio, a la cabeza de las prioridades, es el reto al que nos debemos enfrentar. Quizá ésta deba ser la reivindicación del 1º de mayo.

lunes, 10 de diciembre de 2001

18 DE JULIO

Lo deja todo atado y bien atado como sus maestros: Havelange y Franco. Imagino al generalito “Juan haz como yo, no te metas en política”. El delegado nacional para el deporte obedeció. Demócrata de toda la vida, como mi maestro en la vieja escuela de Rasueros, como tantos que cuentan la vida desde el punto que les interesa, como si antes nada hubiera ocurrido, como si ellos mismos no hubieran existido. Nos roban la memoria con absoluta impunidad. Aquí nunca se cumplió la profecía que, sobre Chile, cantó Serrat “...y pagarán su culpa los traidores...”. Con hilos dorados tejieron paños de orfebrería que deslumbraron las zonas de sombra y nos hicieron ver que allí nunca estuvieron. Negó la camisa azul y emergió inmaculado para trazar la besana de la mercantilización deportiva. Enterró a Coubertain y la plataforma soñada para unir a los pueblos a través del deporte se convirtió en una corrupta empresa gestora de espectáculos. Prefiero recordar la sonrisa de Jesse Owens miniaturizando, más, a Hitler. Verano del 36. Alborada de Samaranch.

lunes, 2 de julio de 2001

UN TONTO HACE REIR A CIENTO

¡Este partido lo vamos a empatar! Año 94. Bochornazo en el Valladolid-Celta. Y no sólo por el calor del nonato verano. Unos mordían la tabla salvadora de la promoción en el Salto del Caballo, los otros no descendían. Y todos tan contentos. Incluidos los que pagaron por ver ¡un partido de fútbol!. Desprecio para el espectador, desprecio para el resto de contendientes, desprecio para el deporte. Donde dos debían contender se limitaron a mirar al cielo, por si llovía, no vayan a mojarse. Los desmarques, quiebros, pases verticales, profundos, la búsqueda del gol fueron suplantados por toquecitos horizontales hasta conformar un esperpento del que mofarse sino fuera por el perjuicio acarreado al resto de los implicados. Me dirán que hace siete años, vaya actualidad. Pero el 0-0 de Aznar-Zapatero destilaba el mismo aroma. Incluso apareció el insufrible que siempre nos encontramos en el estadio. Con la baba hasta los pies de adular al jefe resbaló y tras el golpe en la cabeza comparó “El Quijote” con los jarlenglobertrotes. Me hubiera reído de no haber sido un ministro.

martes, 26 de junio de 2001

JESÚS Y EL BECERRO DE ORO

Da igual ganar la liga, ascender a cualquier categoría o quedar segundo en el trofeo de la galleta. Tras las consabidas celebraciones “espontáneas” llegan los paseos triunfales, las soflamas desde algún balcón aderezadas con obligatorias menciones a los atributos que les llevaron a dicho triunfo y como colofón una visita a la virgen de turno que tanto contribuyó en el logro. No se sabe que opinarán las vírgenes rivales, ni imaginar quiero como estará este año la moreneta, es un suponer. Vestigios de un pasado del que no queremos acordarnos. Curas consagrando a aduladores del becerro de oro. Teocracia militar que ha impregnado nuestras costumbres de un rancio aceite con cuyo hedor convivimos sin que revienten nuestras pituitarias. Un día Jesús entró en el templo y, cual manifestante antiglobalización, gritó hasta la afonía (Mateo 21,12). Hipócritas, ciegos que guían a otros ciegos, raza de víboras, sepulcros blanqueados fueron lanzados contra los que vestían sotana. El hombre, creador de dioses a su imagen y semejanza, le subió al altar. Pero antes le había matado.

martes, 19 de junio de 2001

ADIÓS GIL, ADIÓS CANEDA

A mí me gusta el fútbol. Eso que comienza cuando el árbitro toca el silbato y con el mismo toque, repetido tres veces, concluye. Y sin embargo convertimos en protagonistas a los gil de turno. Necios avalados por el dinero que están convencidos de que el dinero todo lo compra. Casi siempre es así, y por ello cuando algo se torna inaccesible a sus pecunias el sentimiento de frustración es superior a la del resto de los mortales. Es entonces cuando su lenguaje de casquería mana a borbotones y  encuentra acomodo en los medios de comunicación en detrimento de la información de lo que sólo es fútbol. Se presentaron con un discurso oportunista y demagogo, consiguieron el fervor de gentes que necesitan el narcótico de la ilusión, oír a alguien que les hable de futuros esplendorosos. Pero todo acaba. Se puede engañar a uno mucho tiempo, se puede engañar a todos algún tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo. Los gritos de los aficionados del atleti y del Compostela a sus presidentes pueden ser el fin de una pesadilla.