Nada ha cambiado desde ayer, simplemente queda un día
menos para no se sabe qué. Pero la crisis oficialmente ha terminado. Usted,
pardillo, aún no se ha dado cuenta porque no tiene estudios en Cambridge, pero
si Emilio Botín o César Alierta, que ellos sí saben de lo que hablan, lo
anuncian a los cuatro vientos ¿qué razones quedan para dudar? Piénselo, no se
deje abatir por el clima de pesimismo. No permita que los agoreros le engañen,
la crisis ha terminado, extienda el mensaje en su círculo más íntimo. Comuníqueselo,
por ejemplo, a su hija, sí, a la mayor, la ingeniera que trabaja en Birminghan
en una hamburguesería. Seguro que cuando esta tarde le vea sonreír a través del
Skype se va a llevar un alegrón.
Blog sin más pretensión que la de poner un poco de orden en mi cabeza. Irán apareciendo los artículos que vaya publicando en diversos medios de comunicación y algunas reflexiones tomadas a vuelapluma. Aprovecharé para recopilar artículos publicados tiempo atrás.
jueves, 14 de noviembre de 2013
lunes, 11 de noviembre de 2013
SABER HACIA DÓNDE
La asociación de estos datos, dejados caer así, por su
peso, puede resultar estremecedora pero son solo dos datos puestos a la misma
altura. Dato uno: El número de personas desempleadas en Alemania el año de la
víspera del ascenso al poder de Adolf Hitler rozaba los 5.6 millones. Hay que
añadir que la población total sobrepasaba los 67 millones. La vieja noche de la
Belle Epoque era un vago recuerdo, la gran depresión hundía las economías de
los países occidentales y el motor de Europa, sin haberse rehecho de la
puñalada que supuso la derrota en la I Guerra Mundial, gripaba. El resto de la
historia, más o menos, ya la conocemos. Dato dos: El número de parados
registrados este pasado octubre en esta España de 47 millones de habitantes, supera los 5.9 millones. Otra crisis internacional, cebada en lo local con
argumentos propios, castiga con crudeza al corazón de la Península Ibérica.
Unan los dos números y empiecen a temer. Lo sorprendente, sin embargo, es que
si un amnésico o un extranjero desinformado pasease por cualquiera de nuestras
calles no sería consciente de los dramas que se esconden entre las paredes. Los
analistas foráneos lo flipan, ¿cómo es posible, se preguntan, que estando las
cosas como están tanta gente continúe sin moverse? Lo cierto es que si uno pone
la oreja al tanto, igual da en un bar o que en la puerta de un colegio, en la
sala de espera de un ambulatorio o en cualquier tertulia improvisada alrededor
de un banco en el parque, escucha siempre la misma coletilla: algo hay que
hacer. Pero ese algo no se hace porque nadie sabe lo que es.
jueves, 7 de noviembre de 2013
LA PATA OSCURA
El
lobo no había conseguido su propósito en el primer intento, pero no se dio por
vencido. Caminó hasta el molino y allí pudo blanquear la pata metiéndola en un
saco de harina. Ahora sí, pensó, Regresó ufano a la casa de los siete
cabritillos. Una vez allí golpeó dos veces la aldaba, escuchó el estruendo de
la chavalería e imposto la voz.
-Abrid
la puerta hijos míos, soy vuestra madre.
Los
cabritillos, advertidos tras el primer intento, desconfiaban. Antes enséñanos
la pata, dijeron. El lobo les mostró la pata enharinada y las ingenuas
criaturas se convencieron de que era su madre quien estaba detrás. El resto del
cuento de Perrault ya lo conocemos.
En
su primer intento, el ministro Wert llamó a la puerta de los ‘Erasmus’, pero
estos le pidieron que enseñara la pata. Wert se la mostró. Es parda, no eres
nuestra madre, le dijeron. El ministro, incrédulo, se la tuvo que mirar. Cuando
comprobó que, efectivamente, su pata no parecía blanca se sorprendió.
domingo, 3 de noviembre de 2013
JUSTICIA DE PANA
A la
justicia se le representa como una mujer con los ojos vendados portando
una balanza en una mano y una espada en la otra. Como mujer en honor a
la diosa griega Themis y a su secuela romana Iustitia. La venda,
pásmense, pretende transmitir la idea de que no tiene ojos, de que todos
somos iguales ante ella. La balanza simboliza el equilibrio, las
pruebas y los argumentos se pesan antes de valorar. Con la espada se
explica que el veredicto se ha de cumplir por las buenas o por la
fuerza. En realidad, si nos atenemos a lo que dicta el refranero,
podríamos asegurar que la justicia es hombre y zamorano seguro ya que en
su atuendo no falta el pantalón de pana con remiendo en el culo. No
puede ser de otra forma, ropa vieja cuyos pliegues se adapten a nuestro
cuerpo y remiendos que vayan cubriendo los agujeros por donde entra el
frío y asoman las vergüenzas.La justicia tiene (debe tener) un sentido
armonizador en las sociedades, por lo que siempre porta un sustrato
cultural, la forma con que cada grupo humano valora lo que es bueno y lo
que no lo es en los comportamientos individuales y la manera de
organizar la propia sociedad. Pero no es suficiente con una serie de
sobreentendidos, para poder hablar de justicia es imprescindible que lo
dicho anteriormente se articule, se codifique y que haya personas
encargadas de administrarla con rigor e imparcialidad.
jueves, 31 de octubre de 2013
EQUIPO EN ORDEN

Con la cena sin apenas digerir, en cuanto hayamos
comido la última uva al ritmo del reloj de la Puerta del Sol, se
cumplirá el medio siglo de aquella sarta de astracanadas englobadas en
el infamante título de ‘Veinticinco años de paz’ que fueron ideadas y
dirigidas por Manuel Fraga para que sirvieran como un panegírico del
régimen franquista. Con los cuerpos aún calientes del fusilado Julián
Grimau y de Francisco Granados y Joaquín Delgado pasados por el garrote
vil, con el Siniestro Tribunal de Orden Público recién parido, el
entonces ministro de Información y Turismo hizo suyo el encargo de
ofrecer ante la ciudadanía (la propia y la exterior) una cara amable de
la dictadura. Barrida durante la guerra la España republicana,
silenciados en la posguerra los rescoldos de oposición, se hacía
necesario esgrimir una sonrisa y dirigir un verbo conciliador que
escondiera los cadáveres bajo la alfombra.
LA LEY DE LA FRONTERA
A orillas de ese
Mediterráneo que cantara Serrat suena un vals. Pablo y Anna, los novios, giran
y giran arrobados mientras los invitados aplauden y vitorean la unión que se
escenifica. La pareja no se diferencia de tantas otras en idéntico trance, pero
el escenario y los figurantes explican que son otra cosa distinta de la
mayoría. Ambos, no hay más mérito que el azar, son hijos de dos familias de
potentados: los Lara y los Brufau, y solo por eso ya llaman la atención. La
lista de invitados se pudo realizar copiando de la revista Forbes el listado de
los 30 apellidos ‘ilustres’, las 30 familias que se reparten España. Para
completar, simplemente hubo que añadir el nombre de alguno de esos capataces
que tan bien defienden sus fincas. Dos de ellos, Rajoy y Mas, llevan tiempo
peleando a banderazos por discusiones sobre dónde fijar la frontera de la
responsabilidad de cada cual. Cuentan sus versiones a quien les quiera oír.
Pero en la boda se ríen de estas cuitas con las que entretienen al personal,
con las que evitan que el populacho mire al salón donde están los dueños de
verdad de todas las tierras, las de allá y las de acá.
sábado, 26 de octubre de 2013
AROMA VIEJO, NUEVA ERA
No hace tanto, ya
corría este milenio, a una de mis tías (como no quiero que se enfade no diré
cuál) le dijeron que un periódico de Valladolid había publicado un artículo mío
en el que hacía alguna referencia a su pueblo y el mío. Me llamó para decirme que
lo quería leer, que si se lo podía mandar. Le dije que no se preocupase, que se
lo mandaría a José Luis (un vecino con internet) por correo electrónico y que
él ya se encargaría de hacérselo llegar. No te preocupes, me dijo ella, ya me
paso yo a buscarlo. Y añadió ¿cuánto tardará en llegar? Evité la carcajada y le
dije que nada, que se pasase cuando quisiera, que ya estaba allí. Mi tía se río
con mi respuesta más de lo que yo hubiera hecho con la suya y sentenció: Mira
que nunca vas a cambiar, siempre con tus bromas, lo que quieres es que vaya para
que José Luis se ría de mí. Oye, pues no hubo manera de convencerla de que le
hablaba en serio.
jueves, 24 de octubre de 2013
APRENDER A SER ESPAÑOL
Dos versiones de un mismo artículo, una más burra que otra.
lunes, 21 de octubre de 2013
ÁLVARO, HAZLO ANDAR
Cuentan los que de la cabeza entienden, si es que de
ese adorno que remata el cuello entiende alguien, que uno de sus
mecanismos internos sirve para que nos evadamos de la realidad cuando
esta nos presenta un panorama desolador. Así andaba la mía viendo el
partido de ayer, buscando la evasión por el doble camino que niega la
realidad: zigzagueando para no ver lo que ocurría y recreando universos
paralelos. Recordaba el homenaje de los futbolistas del Pucela a Sisi
(historia del Valladolid) y, a la par, me preguntaba qué tiene que
ocurrir (o qué pasa) con la cantera (lo que debiera ser el futuro)
para que, estando lesionado (eso dicen) el mediapunta con los galones de
titular y con una lesión el llamado a sustituirle, el puesto sea
encomendado a un jugador dotado para otros menesteres.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)