sábado, 12 de noviembre de 2016

OBITUVARIOS

Si el argumento lo hubiese escrito Francisco Nieva no sabríamos en qué categoría -entre las que el propio autor dividió sus trabajos- encuadrar la obra. Podríamos pensar en catalogarla como ‘Teatro furioso’ por aquello del arranque del rival; pero dado que apenas hubo rapidez, ni sorpresa, ni pudimos encontrar un ápice de sátira o ironía, este estante queda descartado. Lo intentamos en el vasar del ‘Teatro de farsa y calamidad’ por aquello del resultado; pero no encontramos ninguna trama compleja, ni un poco de intriga, ni hubo personajes que vistiesen la capa del héroe romántico. El partido careció de sustancia suficiente para que el dramaturgo castellano-manchego la hubiera subido a las tablas.

jueves, 10 de noviembre de 2016

NO ES TRUMP, ES EL DESAMPARO

De momento, al menos de momento, los miedos que despierta el nuevo ‘Master del Universo’ son excesivos. Al fin y a la postre, los poderes de los presidentes de los USA vienen limitados por un sistema que constriñe y una estructura que impone. Trump no será una excepción a esta norma. El sistema sirve como cortafuegos para cualquiera que pretenda salirse por la tangente, permite al primer mandatario tomar decisiones siempre y cuando no sobrepasen las líneas prefijadas. La estructura mediática y económica, valga la redundancia, pendiente de unas cuentas de resultados que no está dispuesta a dejar al albur de las ocurrencias del presidente, aprieta o afloja en función de sus conveniencias.

lunes, 7 de noviembre de 2016

ALBERT CAMUS Y LA VIDA...




Hoy se cumplen 103 años desde que naciera Albert Camus. Él escribió la frase que ilustra este texto. Muchas veces me han preguntado que por qué me gusta tanto el fútbol, otras tantas me han dicho que el fútbol sirve para alienar a la sociedad (una especie de opio del pueblo). En esta frase está la respuesta....porque todo eso que ocurre en la vida lo veo mimetizado en un terreno de juego y ver fútbol, analizar lo que acontece en el rectángulo y en el entorno, por tanto, me ayuda a comprender mejor al ser humano. No es sorprendente, claro, que el propio Camus, el mismo que escribió esta frase, escribiese también que "todo cuanto sé con mayor certeza sobre la moral y las obligaciones de los hombres, se lo debo al fútbol" entre otras cosas porque “pronto aprendí que el balón nunca viene hacia uno por donde uno espera que venga. Eso me sirvió mucho en la vida”.

domingo, 6 de noviembre de 2016

UNA FOTO SINCERA-SINCERA

Faltan apenas dos días para que en el calendario se tache la casilla del primer martes posterior al primer lunes de noviembre. Cuando esta circunstancia, como sucede ahora, coincide con un año múltiplo de cuatro, nos ofrece el espectáculo de la elección de la persona que dispondrá durante los cuatro años posteriores del mayor poder en el mundo. Los estadounidenses terminarán determinando si en este caso el cotarro caerá en las manos de Hillary Clinton o en las de Donald Trump. La pelea casi nos retrotrae a aquellos tiempos en los que fue muriendo el ‘Ancien Régime’, un siglo largo en el que la burguesía fue socavando los cimientos de una sociedad dominada aún por la aristocracia posfeudal. En este juego, Clinton asume el papel de icono del ‘viejo orden’. Ella, más que nadie, representa, como se decía por estos pagos, la genuina imagen de las fuerzas vivas. Trump, por el contrario, representa la lucha contra ese orden. Suena paradójico que una de las personas con más poder económico del país pueda ser vista como un ‘outsider’. Sin embargo, por sus planteamientos y las formas de exponerlos, así es. El ultramillonario se ha erigido en el portavoz de los descontentos con el poder de lo que ellos llaman despectivamente ‘Washintong’. ¿Cómo? Diciendo lo que muchos quieren oír, atacando lo que muchos quieren atacar y lanzando exabruptos de la misma manera con que muchos querrían dar un corte de mangas a esa élite. Cada vez que Trump abre la boquita y se arranca con cualquier coz machista, racista o similar, los analistas certifican su muerte. Al poco, resurge en las encuestas descolocando a los opinólogos oficiales. Estos aún no han detectado que buena parte de la población siente que ha perdido el abrigo en medio de tanta fruslería que suena a recauchutada. La apariencia estudiada, las palabras medidas, los debates prefabricados huelen a alcanfor.

jueves, 3 de noviembre de 2016

NO LES HACE FALTA

Al final resulta que la socialdemocracia era eso, algo parecido a una póliza de seguro que cubría a los dueños del capital del riesgo cierto de explosión social. Durante decenios, en Europa Occidental se nos vendió este modelo como el resultado de un consenso social, como el mejor de los sistemas posibles, el único que hermanaba los intereses de los dueños de las grandes compañías con el de sus trabajadores. Los primeros aceptaban una serie de condiciones que permitían a los segundos el desarrollo de una vida digna. Aquellos seguían acumulando y estos vivían razonablemente bien, condición sine qua non para que el estallido social no se produjese. Una especie de Arcadia en la que todo el mundo tenía su asiento de felicidad. 
Hubo factores externos que contribuyeron a mantener vigente la póliza: de un lado, el miedo cerval al demonio rojo del este; de otro, la posibilidad de proveerse de recursos materiales en lo que se llamaba tercer mundo. Nadie, casi nadie, se preguntaba el porqué. Estado del bienestar, lo llamaron. Se estaba bien, buena gana. En estas condiciones, los estados cumplieron su papel. Los partidos de base socialdemócrata implantaban sus políticas y los conservadores no encontraban manera de vencer electoralmente si no era asumiendo los principios de su rival.

domingo, 30 de octubre de 2016

EN UN CLARO DEL BOSQUE

Una tarde, un grupo de pequeños animalillos de diversas especies se reunió en un claro del bosque. Llevaban tiempo preocupados por su supervivencia y decidieron compartir temores y tomar medidas. Días antes, habían resuelto crear una escuela para mejorar los conocimientos y capacidades de todos ellos. Ahora tocaba acordar el plan de estudios y a ello se pusieron. La ardilla tomó la palabra y propuso la escalada como asignatura obligatoria pues a ella le era muy útil para procurarse alimento y huir de los depredadores.  Sería conveniente –prosiguió– que los demás conocieseis los entresijos de este arte. El resto aplaudió la propuesta. ¿Se apueba, por tanto? –preguntó  el papagayo–. No hubo votos en contra. Tomó entonces la palabra la alondra. Bien vendría a todos saber volar, dijo. Es la manera más rápida de desplazarse. Además, aunque haya alguna ave carnívora de la que protegerse, estaríais a salvo de la mayoría de esos animales que están deseando convertiros en su su pitanza. La propuesta fue igualmente aplaudida y quedó aprobada la incorporación del vuelo como materia curricular. En estas, el conejo expuso que, aunque sea considerado algo propio de cobardes, correr y hacerlo deprisa es otro gran recurso cuando de salvar la vida se trata. La carrera debía ser, de la misma forma, materia obligatoria en el plan de estudios. Aplaudieron de nuevo y de nuevo aprobaron la propuesta. El barbo, que seguía el curso de la asamblea desde un manso riachuelo que atravesaba el claro, glosó las ventajas de nadar. No hubo tampoco incoveniente en incorporar el nado al listado de materias. El día que empezaron las clases, el conejo fue adiestrado por la ardilla y al final del día, a duras penas, consiguió subir al árbol. Fue turno de la alondra que le explicó las nociones básicas del vuelo. El conejo saltó de la rama, batió las cuatro patas y hasta las orejas, pero por todo logro solo consiguió estamparse contra el suelo con nefastas consecuencias. El día del funeral decidieron clausurar la iniciativa.

jueves, 27 de octubre de 2016

PARIERON LOS MONTES

No consta que el viejo Esopo visitase alguna vez estos territorios de la península Ibérica ni que tuviese dotes de adivino pero, a pesar de ello, fue capaz de resumir en una breve fábula todo un año de la política española: después de atronar asustando al personal, los montes se abrieron para parir un ridículo ratón. Tras meses de cambios, cambios del cambio y recambios, hemos vuelto al mismo punto en que lo dejamos. Todo el viaje nos ha llevado de Mariano Rajoy presidente a presidente Mariano Rajoy. Conocemos especies de animales que se desplazan andando, corriendo, nadando, reptando, arrastrándose o volando; pero lo de este hombre es inaudito: es el único ser que se desplaza permaneciendo quieto. Mientras los demás iban haciendo el ridículo por separado o todos a la vez, el gallego reforzaba sus posiciones a la par que, supongo, aplaudía a rabiar ante la tragicomedia que se representaba. Quienes piensan que su victoria ha sido pírrica se equivocan. Además de vencer en la batalla se ha llevado por delante a todos sus rivales. Todos y cada uno de ellos están ahora peor que hace doce meses. Él, por el contrario, ha utilizado el año para que la sociedad deglutiese toda la ponzoña acumulada por su partido a lo largo de varios decenios como si nada hubiera pasado; para que dejase de marcar el acento en las políticas llevadas a cabo por el PP durante su cuatrienio de gobierno y se entretuviese con los dimes y diretes del vodevil que han representado esos ‘aspirantes a algo’ que se han quedado en nada.

lunes, 24 de octubre de 2016

MOHÍN POR NO HABERLO VISTO

Plaza de la Solidaridad- La Victoria
Aún era pronto, la comida estaba hecha y a las dos de la tarde de cualquier domingo la vida rebosa en  las calles de la Victoria. Es cierto que menos que antes porque los barrios, al igual que las personas, envejecen irremisiblemente. Quienes, cuando llegué hace un cuarto de siglo, año más, año menos, caminaban henchidos dando la mano a sus vástagos, se apoyan ahora en un bastón. Aquella muchachada, buena parte, ha tenido –burbuja mediante- que comenzar su vida adulta en los pueblos del alfoz, cuando no más lejos o mucho más lejos. Niños aún se ven, claro, pero muchos menos. El barrio envejece pero no pierde, al menos mientras las piernas aguanten, la buena costumbre de salir a la calle.

jueves, 20 de octubre de 2016

OJOS QUE NO VEN, CIE QUE NO EXISTE

Las cuarenta personas que asomaron la cabeza desde el CIE de Aluche consiguieron, no sé si a su pesar, protagonismo por un rato. Mañana, lo que ayer ocurrió, devorado por otras historias, se habrá convertido en historia. Han conseguido, sin embargo, que, aunque solo haya sido por un rato y no fuese ese su objetivo, el grito haya tenido altavoces. En los CIEs españoles, esas cárceles que no son cárceles, se amontonan miles de personas, que por no ser no figuran en sitio alguno como personas, por el único delito de no haber cometido ninguno. Allí esperan a que se les repatríe aunque no tengan patria para que todo vuelva a ser como si su odisea para llegar a donde pensaban que podrían comenzar una vida que se pueda llamar vida nunca hubiera sido. Borrón y cuenta nueva. Su existencia responde, sin más, a la política basada en el “ojos que no ven, corazón que no siente”. Los CIEs existen, pero casi nadie conoce su existencia, lo que es una buena base para que nadie sepa lo que ocurre dentro: unas situaciones de hacinamiento y malas condiciones -denunciadas por diversos organismos no solo españoles-; que, además, fomentan situaciones de riesgo incluso para el propio personal que allí trabaja.