lunes, 20 de mayo de 2024

NO LO VERÁS, ¡QUÉ MÁS DA!

El petulante Owen Thursday, reconcomiéndose por dentro tras su degradación militar, pretende su restitución en el nuevo destino: Fort Apache, un puesto fronterizo con el territorio comanche. Los planes de este arrogante ahora coronel Thursday –personaje, interpretado por Henry Fonda en la película 'Fort Apache' dirigida en 1948 por John Ford– chocan de plano con el sentir, derivado de un cabal conocimiento del terreno y el enemigo, de su inferior el capitán Kirby York, papel que corresponde a John Wayne.

En una conversación icónica en la historia del cine, la altanería de Thursday le impele a sentirse capaz de percibir lo que ninguno de sus soldados, bien conocedores de ese percal, había apreciado; le permite infravalorar a vuelapluma, sin más información que la aportada por su deseo o su prejuicio, a su contendiente.

domingo, 12 de mayo de 2024

LA CARTA JOTERA

El que sí que, que no que, de Pedro Sánchez, carta pinturera como la solapa de una chaqueta, y el triste protagonismo que su muerte ha dispensado a Victoria Prego, discreta como el forro de la misma prenda, se han aunado en el tiempo para mostrar las costuras de una ‘Transición’ que, si bien posibilitó el paso de aquella dictadura a esta democracia, construyó e impuso el traslado por unos rieles que condujeran precisamente a esta y no a cualquier otra forma de democracia. Hubo entonces una España, una España sin intermisión que permanece, una España hereditaria, en la que el poder –el poder, poder, el económico y lo que este arrastra- se envuelve en los valores tradicionales, en la esencia perenne, que al estilo de Kissinger transcribiendo a Goethe prefirió, prefiere, “cometer una injusticia antes que soportar el desorden”. Claro, era su orden el que estaba en juego. Su poder.

LOS FANTASMAS DEL DÍA DEL GETAFE

Las películas románticas retratan el paréntesis de la vida que, siendo vida, habita en una periferia de la propia vida. La historia, centrada por definición en personajes obnubilados por el idilio en ciernes, olvida o aminora cualquier contexto social, político o económico. Y si lo considera, el conflicto generado por dicho contexto se reflejará con la única pretensión argumental de erosionar cualquier dificultad para culminar la película con el obligatorio final feliz, elemento básico de este género que, por previsible, desvela su desenlace en las primeras escenas. Un final feliz que delimita la frontera entre el alelamiento amoroso y el recomienzo de la vida cargada de dificultades, mazazos, miedos, fracasos y frustraciones. También de lo contrario, que si no, apenas merecería la pena:en el crisol de la vida se funden vivencias, emociones y circunstancias bien contrapuestas.

domingo, 5 de mayo de 2024

EL MISMO PARTIDO CONTADO MIL VECES

La cólera carcomía la mollera emponzoñada en despecho del sultán Shahriar. El enojo, apenas contenido en las íntimas simas de su ser, emergía con forma de puñal que decapitaba cada noche a una joven virgen, ofrendada por su visir, con la que previamente habría contraído matrimonio. Así, día tras día, desde el momento en que constató que su esposa había borrado su nombre de ella del listado de objetos privativos de su majestad; desde que se cercioró de la desobediencia, del desacato a una sumisión que él asumía como debida. La afrenta que entendió de una mujer habría de extenderse, como mancha de aceite, a todas las demás. Utilizaría su poder omnímodo, su categórica inviolabilidad, su celo inmisericorde, para asegurar que ninguna escapase de su dominio, para que no existiese siquiera la posibilidad. La cólera, el enojo, el puñal se hundiría antes de cada nuevo amanecer en el cuello de una malaventurada doncella.

domingo, 28 de abril de 2024

NO ME PREGUNTEN CÓMO OCURRIÓ

Supongamos: pocas semanas después del 28 de septiembre de 1928, fecha en la que A. Fleming sitúa su casual descubrimiento de la penicilina, un médico, aún ajeno al hallazgo, disertando sobre las sulfamidas como base necesaria del tratamiento de las enfermedades infecciosas. Su relato, eminente meses atrás, resultaría desubicado, extemporáneo, para cualquier asistente que estuviera al tanto de la innovación que a buen seguro habría de enterrar los procedimientos médicos del pasado reciente. Como a este médico imaginario, con frecuencia se presenta ante nuestros ojos un cambio de paradigma sin que seamos conscientes ni hayamos actualizado el compendio de conocimiento para poder descifrar las nuevas claves. En el ámbito del fútbol, siempre recuerdo al narrador del partido que la selección española disputó ante la de Dinamarca en las frías tierras nórdicas el 13 de octubre de 2007.

miércoles, 24 de abril de 2024

LA BOFETADA DE MAFALDA

Ibarrola

Hace apenas un mes, una chica a la que imparto clases de apoyo me sugirió una reformulación de nuestro trabajo conjunto debido a que “he entrado a trabajar en…” y añadió un nombre que me resultaba absolutamente desconocido. Compartí con ella mi alegría, aunque “yo no sé qué es eso de…”. Ella, sonriendo entre complaciente y condescendiente, me puso al día, “es una pizzería, muy famosa e internacional”. Este fin de semana, antes de compartir un almuerzo, un amigo envió una foto, aderezada con un comentario jocoso referido a la marca del producto, de la vianda que aportaba. No lo pillé, “ahí ya me he perdido”, apunté. Tras explicarme el sentido irónico de la frase, tras aclararme que tal firma disponía de una tienda en la Plaza Mayor de Valladolid, me espetó, -también sonriendo entre complaciente y condescendiente-, “verás cuando cambies de siglo qué sorpresa”.

domingo, 21 de abril de 2024

LAS MIL EXÉGESIS DE PEZZOLANO

Tanscurría la primera mitad porque el tiempo inexorablemente transcurre. Sin más motivo. Alguno a mi vera, cada diez minutos, recordaba la triste pérdida de esos últimos diez minutos discurridos, acumulados y desaguados en la mar, que es el morir donde van a dar nuestras vidas. Y mientras, con el fluir, se nos disipaban las expectativas de que el proceso, el partido, se cerrase con el bien requerido. A todos, menos a Paulo Pezzolano. Les refería la jornada anterior que él, con la fe de un místico, «prefiere atender las oquedades vacías de Paulo Coelho, desear mucho algo con la convicción de que el universo conspirará en su favor», con la certidumbre de un augur, «en medio de la nada se limita a esperar una coyuntura, auspiciado por la suerte o la calidad, que le favorezca». Ha vuelto a ocurrir y prefiero pensar en otras causas. Si no, habría de tomarme en serio a Coelho, y eso sí que no. Más que por una conjura del cosmos o algún designio divino, el Pucela se impone por idéntico motivo, bien que en sentido opuesto, al esgrimido por el doliente autor del romance que relata su derrota y la de sus correligionarios tras el embate árabe allá por el medioevo peninsular: 'Llegaron los sarracenos/ y nos molieron a palos,/ que Dios protege a los malos/ cuando son más que los buenos'. Ser más como cotidiana alusión figurada al hecho de disponer de un mejor inventario de jugadores. Ser más, en el sentido literal, ante un Amorebieta que por un vericueto –o interpretación– absurdo del reglamento perdió un futbolista apenas antes del descanso. Una expulsión convertida en esa coyuntura anhelada, ¿visualizada?, por Pezzolano que transforma la nada en tres puntos. Y así, nada tras nada, hasta el ascenso final.

domingo, 14 de abril de 2024

NECESIDAD DE COMPLEMENTO

El humano aplica su pericia para innovar el mundo que le rodea, bien concibiendo y materializando flamantes utensilios, bien propiciando algún progreso en los útiles de los que ya disponía. En este segundo caso, ocurre con frecuencia que el producto mejorado adquiere una naturaleza propia que, sin despegarle definitivamente del objeto de partida, del significado, requiere complementar su significante. El lenguaje, por tanto, se ha de armonizar con esta nueva realidad conceptual. En principio, la labor de especificar le corresponde a un adjetivo, pero para estas cuestiones cotidianas recurrimos a un complemento preposicional que por si sólo auspicia y redobla la cara de encandilamiento de quien lo utiliza. Un balón cualquiera ya servía para atraer, embelesar y abrir el universo a cualquier criatura; un balón 'de reglamento' sublimaba las emociones. Una tele nos permitía emocionados responder «biennnnn» a la pregunta «¿cómo están ustedes», travesear con las diabluras insumisas de Pippi Långstrump, sufrir con las peripecias de un doliente Marco...; una tele 'en color' alzaba la fantasía hasta la altura del arcoíris.

martes, 9 de abril de 2024

LOS PEORES DE LA HISTORIA

Nunca salgo de un debate siendo idéntico al que era cuando entré en la conversación; nunca concluyo una lectura sin haber incorporado una nueva capa a mi ser; incluso, nunca cierro un artículo sin haberme modificado siquiera un poquito a lo largo de ese diálogo conmigo mismo, con las fuentes que me calan, en busca de los matices pertinentes. Pretendo no solo adquirir nuevos conocimientos sino comprender diferentes lógicas de pensamiento, de vida. Me muevo, me mueven, es así por más que mi vehemencia muestre una seguridad de la que carezco.

Cada vez me cuesta más. No tanto en la escritura. Escribir, al fin, lo hago solo, por lo que -dado que pretendo respetarme/respetarles y procuro, aunque supongo que no siempre lo consiga, aislar proceso y resultado de los virus del interés o la tendenciosidad- aún me pertenece. Sin embargo, en las conversaciones que tratan de algún asunto de relevancia social me topo con posturas herméticas, dictámenes sin pulir, sentencias que cobijan verdades parciales, verdades arrojadizas, mentiras, juicios sumarísimos al que contrapone una opinión desemejante.