Tampoco sería extraño que alguna pareja de zagales continúe haciendo zanja con el ir y venir de mi casa a la tuya con la excusa del ‘ahora te acompaño yo’. Eran los tiempos en los que la hora de recogida no se expendía por prescripción autonómica.
Blog sin más pretensión que la de poner un poco de orden en mi cabeza. Irán apareciendo los artículos que vaya publicando en diversos medios de comunicación y algunas reflexiones tomadas a vuelapluma. Aprovecharé para recopilar artículos publicados tiempo atrás.
domingo, 14 de febrero de 2021
ANTES, AHORA; AHORA, ANTES
martes, 9 de febrero de 2021
LLUVIA MACHADIANA
Hasta entonces, nunca pude abrir la ventana sin que el ruido
me recomendara volverla a cerrar. Es lo que tiene que te caiga justo debajo el
punto en que la avenida de Salamanca pasa a ser de Burgos. Ahora ya es posible
abrir, ver y no escuchar nada. Deseos
tengas y se cumplan, dicen que dice una maldición china.
El silencio, la distancia ya no es una oración subordinada, y si lo es, hemos perdido la secuencia de la frase principal. Las fábulas que comenzaban con ‘el día en que esto concluya’ se han dejado de contar. En vez de alzar la mirada buscando una luz al final del túnel, agachamos la cabeza y tiramos, como se pueda, para adelante.
domingo, 7 de febrero de 2021
NO ‘GOLEMOS’ LO MISMO
-Madre, deme las llaves de casa, me voy a duchar.
Áurea, enlutada desde siempre, torció el gesto.
-Vaya con esta juventud, vais a terminar peces. ‘Tol’ día en
el agua.
-Pues una vez cada día -apuntó mi primo-, para quitar el mal
olor.
-¿Tos los días? Madre del Amor Hermoso. Cuando moza, alguna
vez de vez en cuando en el barreñón.
-Así oleríais.
-Sería, pero como ‘tos golíamos’ lo mismo nadie se daba
cuenta.
Y acabó la primera parte. El aroma a descomposición que desprendía
el Pucela no había variado en una semana, solo que en esta ocasión no difería
del tufo del rival. Ambos ‘golían’ lo mismo. Ni un triste disparo en tres
cuartos de hora. En este mal de muchos, que haya tres con menos jabón podría
ser el consuelo. Y mira por dónde, el Alavés podría ser uno de ellos. Pero en
el descanso, los vitorianos se enjabonaron, pasaron bajo el agua de una idea,
se rociaron con el desodorante de la convicción y se perfumaron con la colonia
del talento de Lucas Pérez. A partir de ahí, se notó demasiado el ‘golor’
pucelano. Hasta la foto lo desprende. No sé si por papanatismo, esnobismo o
mala conciencia tras el gol recibido del levantinista Bardhi, el Valladolid, en
un sinsentido, colocó al debutante Olaza tumbado tras la barrera para defenderse
ante un posible disparo raso de Lucas en un tiro libre señalado a la altura de
Miranda de Ebro. En la imagen se vislumbra la improvisación. Cuesta creer que
la orden partiera del banquillo, que la ejecución se hubiera ensayado
previamente. Lo mismo da cuatro -las inmediaciones del área- que cuarenta -la
provincia de Burgos-.
El mismo Lucas, en la jugada del gol, en otro jirón
arrancado a este deshacer pucelano, acarició el balón media docena de veces sin
oposición. Él, que es el golpe de inspiración de su equipo, al que más hay que
apretar, recibió la pelota, pensó, armó y ejecutó un pase preciso a su
compañero Martín que irrumpía por una vía expedita. Fin en diferido. Faltaba un
buen tramo; era patente, sin embargo, que no habría respuesta. Por eso, pese a
ir perdiendo, cuando habitualmente los minutos parecen volar, el estrambote se
hizo eterno.
Como eterna se está haciendo esta última parte de la
travesía de Sergio; un epílogo que, dure lo que dure, desprende el hedor de ciclo
acabado. Si Sergio leyese esto, si me admitiese un consejo de divorciado, le
diría que diera el paso a un lado. Dar palos de ciego, mostrar lo peor de uno
mismo como en la rueda de prensa del viernes, solo repercute en el propio
menoscabo. Usted es mucho más que eso. Así pues, señor González, ante una
ruptura inapelable, la firma, mejor cuanto más pronto. Será la única manera de
salvar algo de una relación sin futuro y mantener el corazón limpio para
empezar en otra parte. Se ha ganado salir de Pucela con honores, el privilegio
de ser recibido con aplausos cuando vuelva.
Y así, separados, dense ambas partes la posibilidad de
empezar a oler bien en otra relación.
Publicado en "El Norte de Castilla" el 07-02-2021
sábado, 30 de enero de 2021
RASGOS IMPRECISOS
Cuatro minutos y ya había tomado una nota que definía ese lapso como horroroso. Es muy poco tiempo para un juicio tan categórico, ya, pero los antecedentes aportaban una información adicional: ese arranque no era consecuencia de un ataque brusco e intempestivo del rival sino la reafirmación de un estilo basado en el esperar y ver, en una actitud contemplativa. No entendamos esto como una carencia volitiva de actitud, no tiene que ver con las ganas.
martes, 26 de enero de 2021
DE POLÍTICOS Y MÉDICOS
Pero existe un timbre que se activa en cuanto un gobernante roza, usemos este verbo por principio de precaución, los límites que el propio sistema se impone. Así ocurre con el ‘toque de queda’ marcado en CyL a las 20.00. La prosa del estado de alarma no lo permite, el gobierno central no podía no actuar y ha llevado la medida a un TS que, para darla por buena, necesitaría una cabriola schmittiana. No discuto la hora sino las maneras. El sistema es también un compendio de tiempos, formas y liturgias que, si bien no garantizan todo, al menos dificultan la arbitrariedad. El límite del estado de alarma marca la barrera de la separación de poderes entre legislativo y ejecutivo.
sábado, 23 de enero de 2021
NORMALIZADO Y MUY NORMAL
Si la cuenta se refería a los mamuts, resultaba sencillo. Tres son tres y cinco son cinco. Pero las distancias, los volúmenes, requerían otro paso en la abstracción: definir y consensuar en cada comunidad las unidades de medida. Cuando la comunidad fue el planeta, hubo que adecuar medidas válidas universalmente y así el metro o el litro sustituyeron al pie y la vara o a la fanega y el celemín.
miércoles, 20 de enero de 2021
EJERCICIO DE MEMORIA COLECTIVA
miércoles, 13 de enero de 2021
SON LOS PADRES
De golpe, para quien de antemano no lo tuviera claro, hubo constancia de cómo funcionaba la mascarada: la democracia son los padres y los padres somos nosotros. La apariencia de libertad civil en la que vivimos a la que denominamos con ese pomposo nombre, ‘democracia’, solo es posible si actuamos como si creyéramos en ella, nos dotamos de unos usos y liturgias propios y reconocibles y actuamos en consecuencia. De lo contrario, el cuento de los Reyes Magos se nos viene abajo.
lunes, 11 de enero de 2021
AQUEL QUE DIU
Verán. El hombre en cuestión se hizo con un reloj de oro porque un vecino que necesitaba liquidez se lo vendió a precio de ganga. Al llegar a casa, orgulloso, su mujer le bajó los humos: no tenía sentido el gasto, era mucho riesgo llevar en la muñeca un objeto de tanto valor. Para evitar cualquier fatalidad a ella se le ocurrió comprar uno idéntico pero de chapa dorada y dar el cambiazo. Así las cosas, nuestro hombre acudió al trabajo y le comentó lo del reloj a una compañera. Esta entendió que le habían engañado, que era falso. Incrédulo, el Fulano para asegurarse visitó una joyería. El joyero constató la teoría de la amiga: falso de toda falsedad. Obviamente, no dijo nada en casa.